El diputado de Caballas Juan Luis Aróstegui formulará pasado mañana en el Pleno una interpelación al Gobierno de la Ciudad para saber “en qué estado se encuentra la maquinaria y las instalaciones” de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Santa Catalina y para conocer si se están cumpliendo “las normas de seguridad y protección de la salud de los trabajadores”.
El localista también quiere saber si se están utilizando “los medios adecuados para la realización del trabajo” y si se está cumpliendo escrupulosamente el Pliego de Condiciones de gestión de la EDAR, adjudicada a principios de año a la UTE ACC-JOCA para el próximo cuatrienio por cerca de 8 millones de euros.
Según la información recabada por Caballas, el funcionamiento de la planta presenta “notables deficiencias” y las instalaciones “se encuentran deterioradas”, los procedimientos utilizados “son manifiestamente mejorables” y las condiciones de seguridad e higiene de los trabajadores “son lamentables”.
La EDAR ha entrado definitivamente en funcionamiento, una vez que concluyó un periodo de pruebas de varios meses, el proceso de adjudicación del servicio y la posterior contratación de la empresa explotadora del servicio. Al concurso concurrieron, además de la concesionaria, otra decena de ofertas.