La consejera de Asuntos Sociales, Rabea Mohamed, elevará al Pleno en su próxima Sesión Ordinaria una propuesta para cambiar varios artículos del actual Reglamento del Ingreso Mínimo de Inserción Social (IMIS) de la Ciudad
Autónoma, que a partir de la entrada en vigor de su nueva redacción establecerá que su percepción complementaria con otras ayudas tendrá como techo el equivalente a “el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) que anualmente se fije respecto de otras prestaciones económicas a que pudieran tener derecho”.
Hasta la fecha se regulaba que el IMIS sería complementario “hasta el importe que corresponda percibir al beneficiario respecto de los recursos que disponga él o cualquiera de los miembros de la unidad de convivencia, así como de las prestaciones económicas a que pudieran tener derecho”.
La cuantía del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) lo fija cada año el Gobierno central y este ejercicio ha quedado fijado en 645,30 euros al mes (21,51 euros diarios y en cómputo anual en ningún caso inferior a 9.034,20).
Además, según se analizó ayer en la Comisión de Asuntos Sociales por parte de Gobierno y opoisición, el Ejecutivo local propondrá a la Corporación retocar el apartado tercero del artículo 17, relativo al cobro del IMIS, para que se devengue “a partir del primer día del mes siguiente a la fecha de resolución de la concesión”. Hasta ahora el texto establecía que el abono se efectuaría “por mensalidades vencidas”.
La cuantía mensual del IMIS, “una prestación periódica de naturaleza económica dirigida a cubrir las necesidades de aquellas personas que carezcan de recursos económicos suficientes para hacer frente a los gastos básicos para la supervivencia”, está fijada en 300 euros y se incrementa en un 10% por cada miembro de la unidad de convivencia “hasta un máximo de 420 euros”.
Hamed pide un reparto objetivo de la vieja Residencia de la Juventud
La Comisión de Asuntos Sociales acordó ayer elaborar, a propuesta de la representante de Caballas, la diputada autonómica Fatima Hamed, estipular una serie de “criterios objetivos” para proceder al reparto del espacio libre existente en la antigua Residencia de la Juventud de la Plaza Rafael Gibert para distribuirlo entre las distintas organizaciones sociales de la ciudad autónoma. La consejera competente, Rabea Mohamed, trasladó a la Comisión que había “varias” entidades que ya se habían dirigido a la Administración local para encontrar acomodo en el inmueble, en el que la Federación de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos (FAMPA) ha mantenido su sede estable y en cuya planta baja entrará la Asociación Ceutí de Familiares de Personas con Enfermedad Mental (ACEFEP). El Ejecutivo local cerró la Residencia como tal hace cuatro años por motivos de seguridad y recientemente ha dado cabida en ella a los servicios de la Casa de la Juventud para transformar su antiguo emplazamiento en un colegio.