-
Es un colegio que se caracteriza por la innovación y apuesta por nuevos proyectos. Sus orígenes proceden de la Agrupación Escolar Miramar
Es uno de los colegios pioneros en proyectos como el British Council, el ‘Plan de hábitos dietéticos alimentarios’ o la implantación del horario de 9.00 a 14.00 horas. Antes de convertirse en lo que es a día de hoy, los orígenes del CEIP Federico García Lorca se remontan a un centro escolar en el Miramar. “Sus inicios provienen del antiguo colegio Miramar que estaba en la Almadraba. Eran tres edificios en sitios distintos: el Central que se llamaba Comandante General Orgaz, Orientación Marítima en la Cuesta Parisiana y unas microescuelas que entonces ya estaban obsoletas. Teníamos que dar clases trasladándonos de edificio en edificio”, explica el director del centro, Antonio Palomo.
La antigua Agrupación Escolar Miramar dio paso al nuevo CEIP que, además de cambiar de ubicación (ahora en la curva Amaya) también modificó su nombre por CEIP Federico García Lorca, el 16 de julio de 1987, con la inauguración por parte del ministro de Educación Maravall Herrero.
Este curso cuenta con 525 escolares, cifra que responde a aulas “muy masificadas”, a excepción de Educación Infantil, donde la ratio, con 25 alumnos, se ajusta más a las necesidades educativas de los estudiantes.
Los 26 alumnos de la primera convocatoria del proyecto de British Council superaron la prueba de Cambridge
Pueden jactarse de ser pioneros en el programa British Council consistente en impartir, a partir de 3º de Primaria, alguna de sus asignaturas, en castellano e inglés. “Salen con un nivel muy alto respecto a otros centros porque tienen un profesor nativo que imparte clase en ese idioma. De la primera promoción se examinaron los 26 alumnos en la prueba de Cambridge y todos la pasaron”, asevera Palomo.
“Se trata de un proyecto especial donde todas las asignaturas se dan en español y en inglés. En esta clase estamos dando el sistema nervioso que se enseña totalmente en inglés. Así aprenden Ciencias Naturales en ese idioma y hablan tres lenguas porque ya saben árabe y castellano y, por suerte, tienen muy buen nivel”, apostilla la asesora lingüística del British Council en 6º de Primaria, Gloria Daverio de Oro.
El comedor social se engloba como otra de las grandes apuestas del ‘García Lorca’, al haberse convertido en un “sobreesfuerzo de gestión importante” ya que deben atender a 210 niños, frente a los 60 para los que se había previsto inicialmente este servicio. “Son necesarios dos turnos en el comedor y se ha habilitado la mitad del salón de actos para ofrecer la comida de Preescolar, 1º y 2º”, dice Palomo.
La actual situación de crisis de muchas familias ha derivado en un comedor con una doble modalidad: el escolar, en el que participan los alumnos becados por el MECD, un total de 145 niños, y el social, dirigida a niños cuya ayuda procede de la Ciudad Autónoma.
Su talante innovador ha llevado a los responsables del centro escolar a incluir un nuevo proyecto este curso escolar, el denominado PIME (Proyecto de Innovación Metodológica+eTwinning). “Se basa en la filosofía de no podemos enseñar si no aprendemos. Nos involucramos todos y los auténticos protagonistas son los alumnos” apunta la maestra de inglés del British Council por el MECD, Encarnación Serrano.
En contacto permanente con el centro británico ‘Seven Fields Primary School’, el proyecto se desarrolla entre los ciclos de Infantil y 6º de Primaria. En esta ocasión la temática abordada es Egipto, materia para la que los alumnos pueden disponer de dispositivos mobile learning o tablets con las que introducirse en las nuevas tecnologías.