Según informaron fuentes de este colectivo ayer al vicepresidente de la Junta de Personal Docente No Universitario, Antonio Palomo, de la Federación de Enseñanza de Comisiones Obreras (FECCOO), hasta la fecha todos los equipos directivos han trasladado su apuesta por involucrarse en el programa, que empezará a andar en el curso académico que acaba de comenzar.
La Administración local prevé hacer las transferencias a los centros educativos (en función del número de alumnos beneficiarios de becas que cada uno tuvo el año pasado) en cuanto colegios e institutos refrenden su adhesión al programa.
A juicio de Palomo es urgente que las transferencias se hagan “cuanto antes” para que los Consejos Escolares, sobre todo en Secundaria, donde las materias opcionales y las especialidades complican la elección de los libros a adquirir, definan lo antes posible el material a comprar y los alumnos puedan disponer de él “con la menor demora posible”.
“El personal del Convenio está haciendo un esfuerzo ímprobo y, a pesar de todas las incógnitas, esperamos que este proyecto de becas en forma de libros de texto y material escolar rinda el mejor resultado posible en su primer curso de funcionamiento”, deseó Palomo.
“Varas de medir” en las comisiones de servicio
FETE-UGT advirtió ayer de que no comparte la propuesta enviada por la Dirección Provincial del MECyD al Ministerio sobre las comisiones de servicio, ya que no está “dispuesta a silenciar ni avalar los diferentes criterios en la concesión de las mismas para este curso”. El sindicato denuncia que existen “distintas varias de medir” en su concesión y denegación. También alega que el sistema utilizado genera “indefensión” por la escasa publicidad ofrecida por la Dirección Provincial y su “reticencia” a que las solicitudes pasaran por la Comisión Provincial.