“La alteración de orden público”, apunta la Policía, “provocada por el detenido que incitó a los allí presentes para evitar su detención, solo fue reprimida cuando la integridad de los agentes corrió peligro, soportando estoicamente, con antelación, cuantos insultos y agresiones verbales fueron objeto”, indica.
La Jefatura Superior resalta que los policías “tuvieron que introducirse en el mar para conseguir la detención de este individuo”, hecho del que ya informaba ayer este medio, y que “durante este tiempo que se prolongó durante 25 minutos, tuvieron que soportar el hostigamiento de un gran número de personas para impedir su detención, la cual se consiguió cuando llegaron refuerzos”, señala.
“Cuando se procedía al traslado del individuo desde la orilla a la carretera, alentados por el detenido, el público presente insultó y gritó a los polícias con la intención de conseguir su liberación y al no conseguirlo comenzó el lanzamiento de piedras, a consecuencia de las cuales tres agentes resultaron heridos”, puntualiza. “Es en ese momento cuando se emplea material antidisturbio”, matiza. Este dato contrasta con el aportado por los usuarios de la playa que insisten en que el lanzamiento del material antidisturbio se produjo sin que todavía se hubiera detenido al ‘Lubía’ y cuando éste se encontraba en el agua y sin que se hubiera procedido al lanzamiento de piedra alguna. Para la Jefatura, dar a entender que el lanzamiento de pelotas de goma provocó la indignación y esto desembocó el lanzamiento de piedras es una “visión parcial” de los hechos.
Las claves
Ambiente hostil e intervención: Informaciones oficiales y publicadas.
En la edición del Faro de ayer, este medio ya indicaba que un agente se había arrojado al agua para detener al ‘Lubía’ así como que se produjo un ambiente hostil hacia las fuerzas y cuerpos de seguridad allí presentes. En la versión ofrecida ayer por la Policía se destaca esas dos claves: la del servicio de los policías y la del hostigamiento, en defensa de su versión de lo ocurrido, aunque la misma ya había sido publicada.
Agente de paisano: Sin identificación
En un principio, los usuarios de la playa estaban confusos y señalaban que una persona de paisano y armada se encontraba en la zona. Pensaron que era un pistolero que perseguía a quien se ha arrojado al agua, cuando en realidad se trataba de un policía de paisano, que no presentaba identificación alguna para confirmar su profesión.
Heridos: Lanzamiento de piedras
La Jefatura indica que se ha dado una “visión parcial de la realidad” aportando como dato que ha habido tres agentes lesionados. Este medio en su edición de ayer destacaba precisamente este hecho, especificando lo que no hace la Jefatura en su comunicado: que dos son agentes de la Guardia Civil y que uno es policía nacional. Los dos primeros, según la Comandancia, de carácter leve.
El origen de la polémica: Material antidisturbio
La Policía quiere dejar claro que en ningún momento efectuó lanzamiento de pelotas de goma salvo cuando ya fue apedreada y con el detenido sacado del agua. Esta versión es opuesta a la que dan bañistas del Tarajal pero también ciudadanos que se encontraban en las paradas de taxi o autobús o en las cercanías de la rotonda fronteriza que sitúan ese lanzamiento antes, cuando ‘Lubía’ está en el agua.