Francisco Antonio González, delegado del Gobierno, a propósito de las acusaciones de Carmen Ruiz, anterior directora de Enfermería en Atención Primaria, sobre la presunta persecución del Ingesa y la Administración contra su persona por ser socialista, aseguró ayer que la actual directiva lo que pretende es que "no haya una plantilla política, en función de las amistades, las cercanías o las lejanías políticas”, en relación a la anterior legislatura. Preguntado por los periodistas, el delegado insistió en que “eso no va a pasar ahora porque lo que se necesitan son profesionales, no políticos en la sanidad. Que ella haya querido politizar una decisión que está dentro del organigrama, que la politice”.
Ruiz denunció sufrir a manos de los responsables de la Administración General del Estado en Ceuta “acoso laboral fascista” después de que se le denegara su petición de seguir disfrutando de una comisión de servicios para no dejar de trabajar en la ciudad, donde tiene escolarizado a su hijo pequeño, como ya informó este periódico. La socialista dijo que se encontró problemas laborales nada más perder su partido el Gobierno central.