A la espera de que los técnicos del Ayuntamiento acudan a revisar el espacio que quedará vacío este verano con el traslado de Cruz Blanca hasta el Sardinero, la Ciudad y la entidad religiosa se encuentran en conversaciones para ver si fuera posible que el edificio, que se encuentra en un estado muy deficitario tal y como llevan advirtiendo desde hace tiempo, se remodele y sirva de sede para diversos proyectos de ámbito social. Entre ellos, el de poner en marcha un economato de alimentos que dé cobertura no sólo a la barriada de Príncipe Alfonso, sino a la de Príncipe Felipe y Loma Colmenar.
Hace ya más de dos años que Cruz Blanca se planteó la idea de llevar adelante un economato, ya que podría dar una solución a un problema cada vez más acentuado en la ciudad que tal y como explicaban entonces “daría una solución digna a muchas personas necesitadas de la zona y cambiaría la visión de recibir ayuda, ya que no sería una típica bolsa, sino que los beneficiarios acudirían con unos vales a recoger los alimentos que realmente necesitan y consumen”. La Ciudad está de acuerdo, tal y como explicó la consejera de Asuntos Sociales, Rabea Mohamed, que mantiene la idea además de ubicar en el edificio un albergue para personas sin hogar. “No estamos hablando de familias, sino de personas indigentes que se encuentran viviendo en las calles de Ceuta”. Además, entrarían otros perfiles que no tienen que ver con la problemática de las familias que se quedan en la calle por temas de desahucios o accidentes en el hogar, como pueden ser personas que sufran problemas de adicciones, por ejemplo, y que “nos gustaría que recibieran un tratamiento específico y que por ser temas más delicados no es adecuado que convivan con familias que se encuentran en situaciones de emergencia”.
Además, por otra parte Cruz Blanca, que lleva muchos años trabajando en la barriada, ha querido introducir además la idea de crear una oficina que luche a través de diferentes programas contra la exclusión que hay en la barriada.