La primera charla del IV Ciclo de Conferencias fue en la mezquita Qubá, en la calle Sevilla.
Cuando el Profeta Muhammad (saws) comenzó a predicar el Islam en contra del politeísmo imperante en la Meca, las personas de la zona le utilizaban como juez en sus asuntos personales e incluso dejaban las riquezas en su casa porque sabían que él nunca haría un uso fraudulento de las mismas. En un momento determinado, los habitantes querían matarle y le expulsaron de la Meca; le expropiaron sus bienes y los líderes urdieron un complot para acabar con su buena fama entre los ciudadanos. Las tribus ‘qurais’ pensaron cómo apodarle para perjudicar su imagen. Valoraron el nombre de ladrón, mentiroso o asesino, pero desecharon todos esos calificativos porque él nunca incurrió en ninguna de esas acusaciones.
Este acontecimiento de la vida del Profeta formó parte de la conferencia que Malik Ibn Benaisa, profesor que visita de nuevo la ciudad para impartir sus enseñanzas, ofreció ayer en la mezquita Qubá de la calle Sevilla sobre el carácter de Muhammad desde la perspectiva de liderazgo: como compañero, esposo, maestro o instructor, en definitiva, “cómo era como ejemplo”. Esta charla se enmarcó en el IV Ciclo de Conferencias Islámicas que tienen lugar durante el fin de semana en distintos templos musulmanes de Ceuta.
Algunas de las características desarrolladas por Ibn Benaisa fueron la “honestidad; sinceridad; compañerismo; saber sacar el máximo rendimiento de cada uno de los miembros de su comunidad; buscar el beneficio comunitario antes que el propio; antecederse a posibles ataques externos; tener una personalidad cercana a su creador; integrador; lidiar con impostores y aquellas personas que intentan romper la unidad de esa comunidad de la que hablamos; firme y consistente en cuanto a sus principios así como no venderse por cuestiones mundanales”, enumeró.
Las conferencias continúan hoy en la mezquita Ijlas del Príncipe bajo el título ‘Tres grandes virtudes del musulmán’ y ‘Los males del tabaco, las drogas y otros intoxicantes’ en la mezquita Abu Bakr.
Comprensión
“El líder debe tener absoluta confianza en aquello a lo que llama a la gente. Debe creer en ello y creer con certeza que prevalecerá. Y no debe haber discrepancias entre aquello a lo que llama a la gente y sus prácticas. Debe practicar con el ejemplo”, dijo el profesor.
Habilidades
Entre las características del líder se encuentra acomodar a nuevos miembros; capacidad de previsión ante posibles situaciones críticas y adelantarse a posibles acontecimientos; capacidad para alcanzar victorias y obtener lecciones de ella, entre otras planteadas por Ibn Benaisa.