Para abordar la seguridad y expresar la “necesidad de poner en marcha” la Policía de Barrio.
Juan Moreno, vocal de Seguridad de la Federación Provincial de Asociaciones de Vecinos, FPAV, comunicó ayer que tiene previsto pedir un encuentro a la Delegación del Gobierno y a la Policía Local para tratar "qué podemos hacer para que todos estemos más satisfechos con la seguridad en las calles". Este representante trasladó que solo quieren que los agentes estén "presentes" para que los ciudadanos puedan sentirse "más tranquilos y no tengamos que estar volviendo la mirada cuando estemos fuera de casa".
El portavoz reconoció el trabajo del Cuerpo Local y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado pero insistió en la "necesidad de poner en marcha" la Policía de Barrio. Aunque considera loable que se busquen agentes "voluntarios para que estén más motivados", Moreno consideró que su formación se demora demasiado. Asimismo, destacó, la Junta de Seguridad debería reunirse.
Los últimos sucesos salpican la geografía de la ciudad pero en los últimos días se han centrado en el barrio de San José-Hadú. Los comerciantes de la calle Romero de Córdoba, donde se encuentran las entradas laterales al mercado, se quejaron ayer por la "ausencia" de policías a partir de las 17.00 horas y, especialmente a su hora de cierre, a las 20.30. "Cerramos los negocios al mismo tiempo para evitar que alguno se quede solo y puedan aprovechar para entrar a atracarle", indicó Mohamed Zbirat, quien regenta una tienda de moda. En su caso, sufrió un robo hace unos meses en el que se llevaron mercancía, un ordenador y dinero en metálico, enumeró.
"En Hadú estamos abandonados", sentenció José María Román, quien negó echar la culpa a los agentes de los distintos cuerpos de seguridad pero solicitó "más protección" ya que se sienten "desprotegidos". "Anoche -por el martes- entraron dos individuos en mi tienda por la noche. Llevo muchos años detrás de un mostrador y sé que no venían con buenas intenciones. Cuando aparecí y comprobaron que mi mujer estaba acompañada, se marcharon", relató el empresario.
En declaraciones a COPE, Hamido Mohamed, presidente de la barriada de Hadú más conocido como Frugui, trasladó el miedo de los vecinos después del atraco en el salón de juego 'Nevada'. "Esto ha sido solo el comienzo, habrán más robos", teme el representante vecinal, quien advirtió que hay señoras que sufren robos pero no denuncian. Además, Frugui reveló que esta semana también "desvalijaron una casa entera por la noche" cuando sus propietarios se encontraban de puente. Para paliar esta "oleada de robos" pidió la colaboración ciudadana. Alí Hamido, presidente de Poblado de Regulares, también intervino para criticar las "promesas incumplidas" por las autoridades.
Por su parte, desde el Centro Comercial Abierto hicieron públicos los primeros resultados de la encuesta realizada entre los comerciantes sobre inseguridad a raíz del butrón en la 'Joyería Telemar'. Como primeras conclusiones, adelantaron que los establecimientos tienen "miedo" y reconocen que, "entre una o varias veces han sufrido algún tipo de robo en el último año" además de estar por la labor de reanudar acciones conjuntas.
Algunas vecinas jubiladas de la barriada San José-Hadú también protestaron porque, dijeron, "no podemos ir a la caja de ahorros a sacar dinero porque nos arriesgamos a que nos peguen un tirón". Dos de ellas lamentaron que ya no pueden salir a sacar la basura al caer la noche porque temen por su integridad fïsica.
Un pequeño sector de la población sostiene que estos delitos se cometen porque la falta de empleo empujar a cometer hurtos empujados por la necesidad.
Robos en Hadú. Cafetería: "Entraron por la noche para llevarse el dinero de la tragaperras"
"Rompieron la cerradura de la persiana para entrar en la tienda, rompieron el cristal y entraron para llevarse el dinero de la máquina tragaperras y la caja registradora; menos mal que estaba vacía", comentó aliviada la hermana del propietario de una cafetería de la calle Romero de Córdoba, junto al mercado de Hadú. En el transcurso del hurto, uno de los asaltantes se cortó las extremidades dejando un reguero de sangre en la calle. Finalmente, la Policía Local detuvo a los presuntos ladrones.