El presidente Vivas sigue teniendo como prioridad en los próximos días el llegar a un acuerdo tanto con Caballas como con el PSOE para que la reforma del Plan General que irá al pleno ordinario del mes de noviembre se apruebe por unanimidad de todas las fuerzas políticas.
Precisamente, para poder llegar a ese acuerdo antes de la celebración del pleno, la primera decisión que se ha tomado fue el retrasar durante cuarenta y ocho horas la celebración del plenario. En un principio iba a tener lugar el lunes veintiséis y de momento se ha dejado para el miércoles veintiocho.
En la mañana de ayer se celebró una junta de portavoces donde Vivas quería negociar ese punto tanto con Caballas como el PSOE, pero el líder socialista no pudo asistir, debido a que debía emprender un viaje a la Península.
Formulación
El presidente entiende que este acuerdo para la reforma del Plan General, donde se cambiará la formulación urbanística en parcelas como Loma Colmenar, Plaza Nicaragua y el Brull, viene definido por los acuerdos de la Mesa de la Economía y se contiene entre las medidas del Plan Estratégico, de manera que el objetivo es que estos terrenos se pongan en valor y puedan servir para la instalación de empresas y por tanto haya creación de puestos de trabajo.
Hay que recordar que en el pleno de la semana pasada, de carácter extraordinario, ya se decidió dejarlo encima de la mesa para intentar llegar a un acuerdo entre todas las fuerzas políticas.
Lo que si se tiene claro es que todas las medidas que se tomen por parte del ejecutivo que tengan que ver, de alguna manera, con la proyección económica de nuestra ciudad de cara al futuro se desea, salvo que no haya otro remedio, que salgan adelante con el visto bueno de todas las formaciones políticas. E incluso si no queda más remedio que retrasar una decisión, se prefiere que así se haga, siempre que no suponga un posible prejuicio que tener nada más que el apoyo del grupo parlamentario mayoritario, como es el PP.