Ya se informó que el pasado martes el consejero de Economía, Hacienda y Recursos Humanos, Guillermo Martínez, se entrevistó con el director general de Fondos Comunitarios del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas,
que es quien lleva el peso de la negociación española para el próximo marco comunitario entre 2014-2020.
Ayer, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno se le preguntó a Martínez si existía optimismo por parte de este alto cargo, conociendo el entresijo de las negociaciones, si la postura que se iba a defender de Ceuta y Melilla podía tener algún tipo de éxito, una vez aclarado que las ideas mantenidas por los ejecutivos de Ceuta y Melilla han imbuido el espíritu negociador de la Administración General del Estado.
Noviembre
Sobre este particular aludió claramente que le comentó que para el mes de noviembre se espera la convocatoria de un Consejo extraordinario donde se establecerán las posturas y se pretende llegar a un acuerdo con los repartos para esos próximos siete años. Pues bien, el director general transmitió que se veía difícil que en esa cumbre sea posible el entendimiento, porque ahora mismo hay tantas posturas como miembros tiene la Unión Europea, en este caso veintisiete.
Cumbre
Lo más probable es que ante la necesidad de una nueva Cumbre se repita otra en diciembre, pero que incluso, a lo mejor, no queda más remedio que esperar al primer semestre del año que viene para que se fijen las cifras definitivas, porque tampoco son muy optimistas de que antes de finales de año pueda haber luz verde.
De todas maneras, debe tenerse en cuenta que el nuevo marco comunitario de apoyo no entraría en vigor hasta el uno de enero del año 2013 y duraría hasta el treinta y uno de diciembre de 2020.
Ante la propuesta realizada por Caballas en relación con el Plan General de Ordenación Urbana para que el crecimiento de Ceuta pueda ser vertical, no se está muy de acuerdo por parte de propio Gobierno. El mismo portavoz, Guillermo Martínez, vino a decir de manera muy clara que se viene estudiando por parte del ejecutivo el Plan General y como debe ser esa Ceuta del futuro desde hace muchos años y que la reflexión ha producido unos datos que no van para nada en el sentido marcado por el primer partido de la oposición. Dijo que con todos los respetos para la ciudad de Benidorm, nuestra ciudad era absolutamente innecesario que se convirtiera en otra Benidorm con esa construcción que se llevó en esta ciudad a comienzos de la década de los setenta.