Mas, que asistió por la mañana a la Comisión Informativa de Fomento considera que el tema es de tanta trascendencia que es preferible tardar más a realizar un análisis apresurado. “Queremos un trabajo continuo, rápido, pero no acelerado, por eso preferimos anteponer criterios de calidad antes de tener que agilizar su aprobación en un plazo corto”.
“Se trata de algo crucial que va a condicionar nuestro desarrollo urbano, pero también económico y medioambiental”, explicó, “por eso somos partidarios de alcanzar un acuerdo cuanto más amplio mejor”, añadió. Entre los aspectos que gustan a los socialistas se encuentra, por ejemplo, la nueva calificación como suelo no urbanizable de buena parte del monte Hacho, una de las modificaciones sustanciales respecto al plan anterior.
Pero lo que sí criticó es que el nuevo PGOU llega con un retraso de quince años, “y eso es lo que nos dice que debe abordarse de forma seria y sosegada, teniendo en cuenta criterios técnicos y valoraciones políticas acerca de nuestro modelo de ciudad”.
José María Mas también abordó otras cuestiones de actualidad económica, como el acuerdo para suprimir órganos como los Consejos Económicos y Sociales o la reducción de diputados en los parlamentos y cámaras autonómicas. En ambos casos, el diputado socialista manifestó que se trata de situaciones que deben ser abordada conjuntamente con otras, “porque la situación económica actual es de tal gravedad que el problema no se soluciona interviniendo en aspectos puntuales,sino que se tiene que abordar desde una perspectiva global y de conjunto”.
Caballas critica la contratación sexista de azafatas
La coalición Caballas, en “nuestro afán de sacar a la luz y visibilizar los problemas de discriminación que existen en la sociedad” ha denunciado públicamente que en un acto incluido en el programa oficial de las Fiestas Patronales de Ceuta, el homenaje al Vino de Manzanilla se ha lanzado una oferta “sexista y discriminatoria” por parte de la agencia que contratará a las azafatas. Caballas asegura que esta oferta “ofende la dignidad de las mujeres” y es un caso claro de discriminación machista, “que utiliza a la mujer como reclamo, no valorándola por su profesionalidad sino por su cuerpo, dando lugar a la discriminación laboral relacionada con la talla”, algo que se antepone, dice Caballas, ya que la agencia busca para la degustación a una mujer “Joven, bonita, delgada y barata", según figura en la oferta que rechaza a las demás mujeres exclusivamente por su cuerpo. Lamentan que por parte de la Ciudad se auspicien estas prácticas “en un acto organizado y subvencionado” con fondos públicos.