Tal y como ha confirmado la Benemérita, la pareja fue sorprendida cuando desembarcaba los seis fardos de hachís en el muelle. Tras ver la llegada de las patrullas se dieron a la fuga en la lancha, intentando fugarse hacia las costas peninsulares. Fueron las unidades del Marítimo las encargadas de detenerlos, consiguiéndolo a unas tres millas de la zona de playa Benítez. Allí interceptaron la lancha modelo ‘Lema’, color blanco, provista de matrículas, arrestando a los dos ocupantes que no ofrecieron resistencia alguna.
Los detenidos han sido acusados de un presunto delito contra la salud pública, tras ser identificados plenamente como la pareja que se encontraba en la embarcación descargando el hachís.
Decomisada la droga se procedió a su pesaje en las instalaciones de la compañía fiscal dando el peso de poco más de 190 kilos. El Instituto Armado estima que el alijo podría haber alcanzado un valor en el mercado de 29.000 euros. Los detenidos en unión de las diligencias instruidas han sido puestos a disposición del juzgado de instrucción, quedando la sustancia intervenida depositada en el Área de Sanidad de la Delegación del Gobierno y la embarcación aprehendida a disposición judicial.
Las sospechas: buscaban otra vía
Considera la Guardia Civil que lo que pretendían los detenidos era introducir la droga en Ceuta, tras haberla cargando en Marruecos, para luego pasarla a la península oculta en dobles fondos de vehículos, siendo esta una manera menos arriesgada. Está claro que la intención de la pareja era depositar la droga en Ceuta, que debía ser recogida por alguna otra persona para luego ocultarla. Se desconoce si en otra ocasión se habrá hecho lo mismo, pero lo que sí es cierto es que los ocupantes de la semirrígida no se habían refugiado por haber sufrido algún fallo de motor. Ambos, ahora, deberán prestar declaración ante el juez.