En una nueva investigación relacionada con el tráfico de drogas, Marruecos trata de averiguar qué hay detrás de la cocaína que ha sido encontrada en una de las playas ubicadas entre Rincón de Mdiq y Castillejos.
La Brigada Nacional de Policía Judicial intervino la droga después de que las olas del mar la arrojaran, en la noche de Fin de Año, a una de esas playas.
El periódico Al Sabah es el que ha adelantado la información, indicando que el hallazgo de la cocaína tuvo lugar en las primeras horas del Año Nuevo, dándose con 64 kilogramos empaquetados en cuatro bultos, que fueron encontrados en un punto cerca de Restinga.
Después del hallazgo de las drogas, un miembro de una familia de la zona de Wad Dhawiat, procedente de Castillejos, presentó una denuncia a la Policía acusando a extraños de amenazar con matarlos, alegando que las drogas les pertenecían y exigiendo su recuperación o enfrentar serias amenazas contra la vida de la familia.
A raíz de esta denuncia, los elementos de la Policía Judicial se movilizaron rápidamente y lograron detener a tres personas, de entre 22 y 38 años, que estaban detrás de las amenazas dirigidas a la familia.
Estas personas, detenidas el sábado pasado, proceden de diferentes ciudades, y el expediente fue remitido a la Brigada Provincial de Policía Judicial de Tetuán.
Una operación más grande
En un seguimiento del asunto, el mismo periódico indicó que la cocaína encontrada no es más que una parte de una operación más grande, ya que la forma de empacar las drogas y su volumen sugieren que podrían haber sido traficadas desde países asiáticos o de Sudamérica.
Las fuentes también estimaron que la cocaína podría pertenecer a los barones del narcotráfico de la zona de Castillejos, que recientemente se han dedicado al tráfico de cocaína en lugar del hachís, mientras que muchos de ellos todavía están siendo buscados en casos de tráfico internacional.
Finalmente, el artículo de Al Sabah indica que algunos de estos traficantes han mantenido relaciones sospechosas con algunos funcionarios locales, lo que plantea muchas preguntas sobre el grado de implicación de otras partes en estas operaciones internacionales de contrabando.