El presidente de la barriada de Villajovita, Lisandinn Mohamed, ha denunciado el comportamiento del Gobierno de Ceuta respecto a la barriada en más de un aspecto. La ausencia de luces de Navidad, la suciedad o las actuaciones fallidas, entre muchas otras.
No hay luces de Navidad, Villajovita deberá salir de su barriada si quiere disfrutar de la imagen que esta época tan especial del año deja. Y no solamente faltan luces de decorado, la insuficiencia lumínica en la barriada se ha vuelto generalizada provocando “un mal ambiente entre los vecinos” y sensación de inseguridad.
En cuanto al alumbrado de Navidad, Mohamed lamenta haberse sentido como una pelota de ping pong. “Iba a preguntar y me decían que esto no es del alumbrado público, es de la empresa de la luz, cuando preguntas allí te dicen que es de Telefónica y no se puede tocar, y así de un sitio para otro”, dice de la inconcluyente situación.
Respecto a los cables sobrantes que deterioran la imagen de Villajovita, significando además un riesgo público, pide que sean retirados con la mayor brevedad posible. “Un camión enganchó uno de ellos y podría haber ocurrido una desgracia. Era un cable de alta tensión”.
Respecto a la parada de autobús que se puede ver en las imágenes, la califica como “la parada asesina” debido a su proximidad con la carretera, dando sensación de riesgo en caso de que algún coche o moto se salga de la calzada. “Yo, con mis hijos, no me siento en ese banco”, dice Lisandinn.
Y como problema añadido, debido a un desnivel de la vía, “se crea un charco cuando llueve que moja a todas las personas que esperan en la parada. Lleva ahí años y no ponen solución”.
Sin embargo, denuncia que otras barriadas como Varela o Loma del Pez “siempre están impecables”, sintiéndose Villajovita completamente discriminada.
En la acera que colinda con las Murallas Meriníes, los vecinos que circulan a pie deben cruzar a la acera de enfrente porque se encuentran con una vía bloqueada por basura que puede llegar a estar sin recogerse hasta tres días, a pesar de los avisos.
Respecto a esto, “el camión de la basura a veces no puede acceder por coches mal aparcados en el Mixto y no entran”.
La calle García Berlanga, foco de incendios en verano, se ha vuelto un foco de insalubridad en invierno por la presencia de ratas, cucarachas o árboles frutales abandonados. Denuncia así la dejadez de esta zona verdad por el gobierno local.
También reclaman un acceso a la barriada para descongestionar el tráfico de primera hora de la mañana debido al horario escolar, “haciendo a muchos trabajadores llegar tarde a trabajar”.
“La congestión empieza en el Mixto y nosotros debemos pasar por ahí, pudiendo pasar por nuestra barriada. Tenemos dos o tres calles que son viales y que están cerradas, que pueden acceder a García Berlanga, además es algo que ha salido aprobada en pleno”, dice Mohamed con indignación.
Esta descongestión puede ser una realidad, así lo indica el presidente de Villajovita, pero desde la Ciudad la atención a la barriada no está en su parrilla, o por lo menos, así lo hace saber Mohamed, quien ha aportado fotos y vídeos de cada denuncia nombrada.
En esta misma zona, que da a la periferia de la barriada, “se podría establecer un parque infantil o un polideportivo anti vandalismo y tampoco”.
En cuanto al local social de la barriada, Mohamed muestra un gran enfado por el devenir de las cosas, ya que ha visto “okupado” la zona que sería para la reunión vecinal y la celebración de actividades de la barriada.
“Del local social se ha apropiado el club de petanca porque sí. Este local social existe, aunque no está terminado, está así porque ese dinero nunca llegó y no pudimos reformarlo. Todo lo que hacen en Villajovita lo dejan a medias”, declaró.
Además, el local social pintado a toda prisa para la entrega de premios del 50 aniversario del club de petanca sí goza de luces de Navidad, siendo lo único en toda la barriada, “aquello que está okupado por terceros ajenos a la misma”.
Los miembros de la junta directiva “quedamos por teléfono, en cafeterías o por el barrio”, asegura.
También están a la espera de señales viales que mejoren la calidad de tránsito y seguridad en el barrio, pero tampoco llegan noticias sobre ellas.
“Han venido a poner unas barandillas para personas de movilidad reducida y en una zona lleva una rampa, los demás tramos solo llevan barandilla. En un tramo lleva una rampa de unos tres metros y nada, la rampa no la han hecho”, reclama el presidente de la asociación de vecinos.
En una zona de la barriada llevan años reclamando el cambio de “unas baldosas prohibidas” por su estado resbaladizo, otra cuestión que no se soluciona, siendo un auténtico peligro para todos, sobre todo en los días de lluvia.
“Promesas incumplidas, te dejan mal con los vecinos porque prometes algo que no llega. En otras barriadas actúan de inmediato porque sus presidentes forman parte de la junta directiva de la Federación Provincial de Asociaciones de Vecinos a quienes hemos votado para que nos representen y ahora se están aprovechando del amiguismo”, relató sin tapujos.
“Estas barriadas cuentan con servicios antes que nosotros habiendo hecho peticiones posteriormente. Cuando se solicita a las Brigadas Verdes que vengan no vienen y te las encuentras limpiando una playa, cuando eso no le pertenece”, añadió Mohamed.
Respecto al nombre de las calles, el presidente denuncia que muchas de ellas no tienen nombre y si lo tienen “es de los años 80 y la calle Lope de Vega está sin asfaltar desde que yo tengo uso de razón”.
En relación a la antigua puerta de las Murallas Meriníes, espacio de acceso de Villajovita hacia el Mixto, donde está el colegio Valle Inclán y por donde pasan “cientos de niños por la mañana para ir al centro y volver”, pidieron unas vallas de retención y la acción de la Ciudad ha sido “taladrar un montón de barandilla a las paredes de los vecinos, hemos tenido queja y eso se ha quedado ahí de una manera lamentable”.
Por último, se ha pedido la retirada de los contenedores de basura junto a las Murallas Meriníes, así como un adecuado mantenimiento de las mismas por la carga histórica que presentan.
“Queremos sistema de riego adecuado, las aceras siempre están mojadas porque lo han hecho con retales que han sobrado de otros jardines y lo han colocado ahí. Los chorros estaban dirigidos hacia la base de las Murallas y han causado una erosión. Lo que no ha causado la lluvia en años lo ha causado un sistema de riego mal montado”, señala Mohamed.
Tampoco cuentan en Villajovita con contenedores de reciclaje. “A veces utilizan nuestra imagen como que han actuado en el barrio y en Villajovita no se ha hecho nada”, concluye el presidente de la asociación de vecinos de la barriada.
Mientras los vecinos no exijan al gobierno de Vivas, el desarrollo previsto en el PGOU, la Ciudad no progresará. El gasto ingente en losetas y cambios de la iluminación, no puede compensar nunca, el desarrollo urbano planificado.
Los políticos caballas actuales, necesitan un cursillo acelerado en política urbanística planificada y olvidarse de las obras electoralistas efectistas, que dejan anclada a la Ciudad en el siglo pasado y con una carga económica para las futuras generaciones, pues estas obras las pagamos entre todos.
PARA CUANDO UN PASO IR DE VILLAJOVITA A AVENIDA LISBOA ?
HAY QUE DAR TODA LA VUELTA , EN VEZ DE ABRIR UNA CARRETERA O UN CAMINO QUE SE TARDARIA 5 MINUTOS A PIE