Agentes de la Guardia Civil adscritos al Servicio de Vigilancia Aduanera y la 1ª Compañía Fiscal y de Fronteras de la Comandancia de Ceuta han detenido a un hombre por llevar unas sustancias peligrosas para la salud ya que pueden causar infarto.
El hallazgo se produjo tras el registro de su vehículo marca Renault-Megane, de matrícula nacional.
Al infundirles dudas sobre la posibilidad de que transportara alguna mercancía de género ilícito, y efectuado de una forma más exhaustiva, fue encontrado oculto en el maletero una bolsa con 79 cajas de un producto cuya denominación comercial es KAMAGRA, elaborado en la India y cuyo principio activo es el SILDENAFILO, considerado como medicamento que debe ser tomado bajo supervisión médica, al poder provocar infarto de miocardio, angina inestable, arritmia ventricular, palpitaciones, taquicardias, accidente cerebro vascular e incluso muerte súbita.
Se realizó consulta a través del Centro de Información online de Medicamentos de la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (CIMA-AEMPS), con resultado de que es un fármaco no comercializado en la UE y por tanto prohibido.
Por ello se procedió a la detención del ocupante del vehículo, provisto de documentación española y nacido el año 1990, siendo presentado junto con las diligencias instruidas en el Juzgado de Instrucción de Guardia de los de esta Ciudad, como presunto autor de un delito contra la salud pública.
Más investigaciones relacionadas con medicamentos
Del mismo modo, la Guardia Civil y el Servicio de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria han llevado a cabo conjuntamente una investigación contra el tráfico ilegal de medicamentos.
En total se han puesto a disposición judicial a dos personas de nacionalidad española por la comisión de un supuesto delito contra la salud pública.
La investigación se habría iniciado en febrero de este año, a raíz de una intervención de un producto etiquetado como complemento alimenticio sin la declaración aduanera correspondiente.
Los investigados "importaban fármacos desde Turquía, en unas ocasiones sin declarar y cuando eran declarados lo eran falsamente como complementos alimentarios, para sortear los controles aduaneros”, explican.
Los productos eran comercializados posteriormente a través de redes sociales, cuando en realidad se trataba, como ha quedado constatado en distintos análisis, de fármacos cuyo compuesto principal era la “sibutramina”.
Efectos de la sustancia
Esta sustancia es un principio activo “anorexígeno” (supresor del apetito) que proporciona una sensación de saciedad y además produce un aumento del gasto calórico (atenúa la disminución adaptativa del metabolismo basal durante la pérdida de peso), que tomados sin supervisión produce un aumento de la frecuencia cardiaca y la presión sanguínea, que pueden ser clínicamente significativas en algunos pacientes, habiéndose registrado casos de arritmias, cardiopatías isquémicas y accidentes vasculares graves con su consumo.
Además, presenta gran cantidad de interacciones con otros medicamentos.
A la vista de los resultados de estos análisis, la Agencia Española del Medicamento había emitido una alerta y retirado el producto declarado como ‘naturales’, cuyo contenido no se correspondería con su composición, pudiendo ser altamente peligrosos para la salud de los consumidores.