Intentaba cruzar a Ceuta. Y lo hacía ocultando hachís en el interior del vehículo que conducía.
Lo iba a lograr, pero agentes de aduanas destinados en el paso fronterizo de Bab Sebta, en Marruecos, lo impidieron en el transcurso de un servicio ejecutado en colaboración con los elementos de la policía.
Tras registrar el vehículo encontraron 33.7 kilogramos de hachís que han quedado intervenidos abriéndose una investigación para intentar saber dónde fue la carga y preparación de este pase.
La droga estaba escondida dentro de los paneles de un automóvil modelo Kia Sportage, matriculado en Francia y conducido por un marroquí residente en ese país, de 62 años de edad.
Durante la inspección del coche, se encontró un cheque bancario firmado por valor de 5.000 dirhams y 1.890 euros.
Después de informar a la fiscalía, se emitieron instrucciones para el traslado del detenido.
Además, el automóvil y la droga fueron decomisados por la aduana.
Controles en ambos sentidos
Este servicio antidroga se suma a los que se llevan a cabo en el paso fronterizo en ambos sentidos, tanto en la salida de coches de Marruecos a Ceuta que pueden ir cargados de droga o servir de ocultación de inmigrantes, como a la inversa, cuando se intentan por ejemplo introducir sustancias prohibidas.
En los últimos meses se han incorporado nuevos medios de control para dar con la droga, reforzándose de esta manera los recursos técnicos que emplean los agentes de aduanas para este fin.
En el pase a Ceuta hay quienes intentan introducir hachís que, después, tiene que pasar un segundo filtro en el puerto.