El mes de noviembre en curso se está destacando como un mes electoral. Al capítulo de las elecciones de hoy le suceden dos citas de relevancia en la ciudad.
El próximo 29 de noviembre coinciden dos procesos electorales que tendrán en vilo a una buena parte de la profesión ceutí. En juego estarán la junta de personal de los funcionarios de la Ciudad y la presidencia al Colegio Oficial de Médicos.
La sucesión de Juan Prat como titular de los médicos se limitará a tres opciones de la plantilla del Ingesa de Ceuta: Manuela Gómez, de la especialidad de Emergencias, Fernando Pérez Padilla, actual coordinador del servicio de Emergencias, y Enrique Roviralta, otorrinolaringólogo. Los tres se han prestado a responder a cuatro preguntas con el fin de que tanto la comunidad médica, a la que se someterá a la votación, como la ciudadanía vaya conociendo a quien va a representar a los facultativos locales durante los siguientes cuatro años.
Los tres candidatos, que cuentan con sus propios equipos directivos, se han enfrentado en esta entrevista a cuestiones relacionadas con sus próximas acciones, sobre economía y sobre las reformas necesarias en el ámbito sanitario. Como apostilla, los tres candidatos han tenido un breve espacio para dirigirse, como hipotético representantes de los galenos, a la sociedad por completo. Al final, decidirán los galenos ceutíes. Y que gane el mejor.
GÓMEZ: Hay un nuevo código deontológico y guía de ética médica. Somos los garantes ante la sociedad y la profesión, la deontología va en serio. Tenemos la obligación de potenciar la educación deontológica entre los colegiados, sobre todo los jóvenes, la ‘deontología preventiva’. La futura validación de la colegiación incluirá antecedentes penales e infracciones deontológicas. Otro asunto: la sostenibilidad del colegio y de su sede y la búsqueda de herramientas nuevas que ayuden al colegio y sus colegiados y se adapten a las necesidades del momento. Apertura del colegio a los colegiados, para que decidan qué quieren de él.
PÉREZ: a) Posicionarnos firme y activamente a favor de la creación de la Especialidad de Urgencias. b) Exigir a las Autoridades que se nos iguale el salario al de los países de la Unión Europea que dan similares prestaciones sanitarias. c) Impulsar la actividad colegial en materia de formación, docencia e investigación.
ROVIRALTA: Modernizar la estructura organizativa del colegio (creación de página web y base de datos de los colegiados, institucionalización del correo electrónico como medio de comunicación oficial, etc.). Abrir sus oficinas también por la tarde. El horario actual es incompatible con la actividad laboral de la mayoría de colegiados. Asistencia jurídica a compañeros víctima de agresión, reclamando de las autoridades la calificación de delito de atentado contra la autoridad.
GÓMEZ: Ayudar a la sostenibilidad del sistema sanitario es una responsabilidad médica administrativa. No podemos por obligación deontológica permitir los recortes que atentan contra la calidad asistencial y los principios y compromisos asumidos por la profesión.
PÉREZ: Pensión a los jubilados y patronato de huérfanos.
ROVIRALTA: De entrada, no estoy de acuerdo con los recortes. Pero para responder a su pregunta: no se deberían hacer recortes en los gastos de personal. Se puede disponer de los mejores medios técnicos, pero si se carece del personal sanitario cualificado y motivado, difícilmente habrá una asistencia de calidad.
GÓMEZ: Hay que incluir normas que aumenten la seguridad del paciente en el ámbito de la prescripción: bioapariencia, envases iguales, no modificaciones de la molécula y las normas que sugiera el observatorio de la prescripción. Las reformas más urgentes serían la de la sostenibilidad del sistema: planificación adecuada de las necesidades de recursos humanos. Promoción y garantía de la calidad asistencial, garantizar un elevado nivel competencial de los profesionales.
PÉREZ: No, por insuficientes. Se tira a la basura una gran cantidad de medicamentos. Habría que prescribir la cantidad exacta del medicamento que necesita el paciente en vez de recetar ‘cajas’.
ROVIRALTA: Respecto a la primera pregunta, en líneas generales sí, pues se persigue el ahorro en el gasto farmacéutico. Pienso que falta información más precisa respecto a la prescripción por principio activo, que debe ir dirigida a los pacientes, farmacéuticos y a los propios médicos. Además sería necesario impulsar la investigación farmacéutica nacional para ahorrar en costes de patentes y evitar la destrucción de empleo en la industria. Por último, creo que la reforma más importante (y a la vez parece que la más difícil) es armonizar y unificar criterios en la sanidad pública, lo que hace que el Sistema Nacional de Salud esté menos cohesionado y sea menos eficiente.
GÓMEZ: A los ciudadanos, que la profesión médica ha dado un ejemplo de compromiso con el paciente y la sociedad a través de su código deontológico del siglo XXI, una de las más avanzadas de Europa. Para mejorar esa relación tan especial entre médico y pacientes también necesitamos que los legisladores aporten las herramientas adecuadas. Que esa responsabilidad no sólo recaiga sobre nuestros hombros.
PÉREZ : Pediría a los ciudadanos un acercamiento a sus médicos de cabecera y que les otorgaran una gran confianza, que estoy seguro de que no serán defraudados. A las autoridades, legisladores, rectores y demás, les pediría que hicieran un generoso esfuerzo en la Formación Sanitaria desde la edad preescolar y durante toda la vida, pues sólo el conocimiento y la colaboración por parte de todos los ciudadanos de los problemas en el ámbito sanitario pueden hacer que el sistema sea sostenible.
ROVIRALTA: Que sepan que sus médicos son unos magníficos profesionales, que están a su servicio y que su trabajo se basa, además de en los conocimientos y habilidades, en la confianza y el respeto entre el médico y su paciente. A los políticos, que consideren a la profesión a la hora de legislar en materia sanitaria. Y que no se politice la sanidad.