Ceuta ha sabido superar los distintos baches que han marcado su historia. Lo ha hecho, principalmente, gracias a sus gentes, al ímpetu y a la lucha de una sociedad que sabe adaptarse a los cambios y que vive marcada por una serie de condicionantes propios de su ubicación geográfica.
Ceuta celebró ayer su día con un acto oficial que sirvió para reconocer a figuras e instituciones que han sido claves en la historia local, desgraciadamente dos de ellas a título póstumo.
En esa jornada oficial no faltó el acertado discurso del presidente de la Ciudad, Juan Vivas, que vino a servir a modo de radiografía de las circunstancias que ahora salpican a Ceuta y que en las últimas semanas han venido marcadas por la entrada masiva de inmigrantes, sobre todo menores de edad.
Vivas volvió a hacer hincapié en la necesaria solidaridad territorial que el resto de España debe mostrar hacia Ceuta y contó con el respaldo del presidente del Senado, Pedro Rollán, quien pidió la convocatoria urgente de la Conferencia de Presidentes para alcanzar los acuerdos necesarios en relación con la presión migratoria soportada no solo por nuestra ciudad sino también por Canarias.
Ceuta no está sola, ayer se puso de manifiesto. Ceuta tiene apoyos y estos tienen que materializarse de inmediato en actos concretos.