Hay personas que siempre permanecen en el recuerdo de una ciudad. Y José Miguel Antúnez es una de personas de Ceuta que no se olvidan, que viven en el recuerdo de todos los que le conocieron. Pasará el tiempo y tampoco su familia podrá evitar la emoción al hablar de él.
Su hermano, Daniel, acompañado de los hijos de José Miguel, ha sido el encargado de recoger este lunes, Día de Ceuta, la Medalla a la Autonomía a un hombre que destacó en el ciclismo, dentro de la Policía Local y en la UGT.
Daniel Antúnez, visiblemente emocionado tras recoger la distinción, ha querido dar gracias en nombre de su familia a la sociedad caballa por este reconocimiento, al mismo tiempo que ha agradecido el “enorme apoyo que ha recibido nuestra familia por parte de todos los que le conocían y apreciaban”.
Un luchador nato que “lograba todo lo que se proponía”. “Para quienes no le conocieran, cosa que dudo, José Miguel fue en el ámbito deportivo uno de los precursores del ciclismo de montaña en 1992 o 1993. Pero no se conformó con eso, fue durante dos décadas referente de este deporte, paseando siempre el nombre de Ceuta por todas las ciudades”.
Su hermano Daniel ha recordado a José Miguel como un caballa “orgulloso” de serlo y que además hizo que Ceuta resonara en los más importantes pódiums ya que consiguió un cuarto puesto en Gijón en 2011, además de ser durante años presidente también de la Federación de Triatlón de Ceuta.
Un mundo el deportivo que quedó huérfano con su partida ya que, tal y como ha recordado Daniel, José Miguel fue “uno de los pioneros” en pruebas que hoy son atractivo turístico para Ceuta como Sierra Bullones o la Cuna de la Legión. Pero también salió de las dos orillas de nuestra ciudad para consagrarse, “siempre junto a su equipo en una de las carreras más prestigiosas” como son los 101 kilómetros de Ronda, donde “hoy día, diez años después, guardan el récord”.
“Él sentía el orgullo de representar a Ceuta allá donde fuese, se sentía muy orgulloso de ser de Ceuta. Era un hombre de inquietudes también en el ámbito laboral, lo que le empujó en el Cuerpo de Policía de nuestra ciudad. Quiero agradecer desde aquí el homenaje que le hicieron sus compañeros en el acto de despedida de mi hermano, así como al Club San Urbano por el homenaje que le realizaron este año en la carrera de Montes de Ceuta”, ha continuado.
Con el paso de los años, José Miguel Antúnez “sintió la necesidad de colaborar con la gente de Ceuta”, lo que le llevó a la UGT. “Durante los más de 20 años que estuvo, peleó por mejorar las condiciones de los trabajadores. A todos nos quedará la imagen de persona comprometida. En la familia nos tenía acostumbrados a las interrupciones de llamadas de sus compañeros pidiéndole ayuda”, ha proseguido Daniel, que ha confesado que a día de hoy le sigue parando “gente por la calle para darme gracias por lo que él hizo”.
Aunque los desvelos de este caballa eran su familia. “Sus dos hijos eran su vida. Ellos tienen hoy la obligación de sentirse orgullosos de como era su padre, además de sus padres, Tino y Mari Conchi, unos padres que solo podían estar orgullosos”, ha continuado Daniel, remarcando que su familia y su forma de ser “le llevaron a alcanzar todas las metas que se propuso” como la Medalla que hoy se le otorga, “una medalla que llevaremos en el corazón cada vez que le recordemos”.