Un Perthes con luxación de cadera izquierda es la enfermedad que está afectando física, psicológica y económicamente a la ciudadana de Ceuta, Mª Ángeles Delgado. La discriminación sufrida por la sanidad ceutí y gaditana la han llevado a realizar una denuncia pública de su caso.
Delgado padece Perthes desde su nacimiento, ha convivido siempre con un tornillo en su cadera y aguantando los dolores propios de la enfermedad, hasta que en 2020 se agravaron y empezaron a afectar seriamente en su vida, necesitando una prótesis mediante operación.
“No puedo andar más de 50 metros, no puedo dormir bien, tengo dolores constantes. No puedo limpiar, ni hacer la compra. No puedo coger peso, voy agarrándome a lo que puedo por la calle”, explica.
Además del dolor siente una gran impotencia por los daños económicos que esto le está provocando, pues de trabajar en el Casino Militar y como autónoma en la orquesta que comparte con su marido, ha pasado a una actividad nula por una incapacidad total permanente diagnosticada.
Sus ingresos se han reducido a una ayuda por esta situación.
Desde 2020 esperando la operación
Esta ceutí lleva desde 2020 esperando una operación que no llega, respetando todos los procesos sanitarios requeridos. Debido al COVID la situación se vio paralizada.
En junio de 2022 tuvo que cogerse la baja de su trabajo debido a los insoportables dolores que estaba sufriendo, pero viendo que no llegaba una solución volvió al trabajo en julio teniendo que volver a la baja en septiembre del mismo año.
Fue entonces cuando acudió al traumatólogo Cordero, cuyo diagnóstico tras los estudios procedentes fue la necesidad de una operación debido al grave estado de su enfermedad. “Yo te opero”, fueron las palabras del médico según Delgado.
En octubre le indicaron que debía trasladarse a Cádiz ya que en Ceuta no se realizan este tipo de operaciones.
En febrero de 2023 se trasladó hasta San Fernando, donde el traumatólogo allí ubicado le indicó que estaba en un estado grave y que necesitaba la operación. La envió a Ceuta de nuevo a realizarse un TAC y le dijo que volviera una vez realizado.
Una vez hecha la prueba requerida volvió a su cita el 31 de mayo de 2023, en Cádiz, donde le realizaron las medidas para la prótesis y la ubicaron en estado preferente de operación.
Desde mayo de 2023 se encontraba en lista de espera para operación con un traumatólogo.
En diciembre, al no recibir noticias llamó para informarse sobre el estado de espera. También lo hizo en febrero de 2022, donde le indicaron que se encontraba la número 20 en lista de espera pero que el traumatólogo que la había diagnosticado ya no estaba, que sería otro el que le realizara la operación.
La primera en lista, pero nada
En abril de 2024, se posicionó primera en lista de espera y, llena de esperanza y alegría, esperaba esa operación que le cambiaría la vida, pero no recibió ninguna llamada.
Viendo la rapidez con la que habían avanzado estos últimos meses no entendía la situación, por lo que decidió llamar e informarse. “No estamos realizando operaciones de cadera”, fue la respuesta que le dieron.
Le aconsejaron pedir el Documento 08 que desvía a los pacientes con necesidades urgentes del hospital público a una clínica privada en Cádiz, pero para su sorpresa, los ceutíes no cuentan con este derecho o privilegio.
Todo esto acompañado de gastos económicos en viajes continuos de Ceuta a Cádiz de los que la sanidad no se ha hecho cargo porque le pagaban un autobús en el que debido al Perthes no puede estar mucho tiempo porque le ocasiona dolores.
En junio de 2024 vuelve a Cádiz a informarse presencialmente, pues todo empezada a oler raro y quería explicaciones sobre la situación que estaba viviendo.
Allí descubre por una paciente que sí se están realizando operaciones de cadera y que gente que se encontraba en la lista detrás de ella ya habían sido operadas.
Y he aquí la gravedad de la situación: la estaban desplazando por no haber sido tratada por ninguno de los traumatólogos actuales de la plantilla (recordemos que el traumatólogo que le realizó los estudios ya no se encontraba en el hospital).
“Vengo de Ceuta para que veáis que no soy un número, que soy una persona y que estoy sufriendo físicamente y psicológicamente, y, además, económicamente”, fueron las palabras de Delgado.
Le dieron un paracetamol y un enantyum y la mandaron a casa.
Presentación de una reclamación
Tras esto decidió poner una reclamación en el Hospital Puerta del Mar de Cádiz, donde dicen quedaron perplejos con la situación, y al llegar a Ceuta hizo lo conveniente en el Hospital Universitario.
A principios de julio recibe la llamada de la secretaria del director de Ingesa informándole de que habían recibido su reclamación. A los dos días recibe un correo por parte del subdirector del Hospital Universitario de Ceuta en el que le aseguraba que personalmente se iba a hacer cargo de su caso e iba a darle una solución, que iba a ser operada pronto.
La solución fue una nueva cita con un nuevo traumatólogo, esto significaba volver a empezar el proceso que inició en 2020, por el que lleva 4 años esperando y una gestión que podría haber realizado ella misma.
La solución: una cita médica. La indignación de Mª Ángeles ha sido tal que ha decidido hacer pública esta denuncia para exigir una operación temprana y poder volver a su vida.
“Quiero volver a trabajar, quiero tener mi vida, y por supuesto, no quiero perder mi trabajo, y estoy a punto dado el alargamiento del periodo de baja del que no soy responsable”, explica.
Desde el principio se le aseguró una operación que no llega, se siente vacilada por el sistema sanitario y quiere una solución que no sea volver a empezar. “Estoy indignada, y volver a empezar el proceso y volver a realizar gastos económicos me está afectando psicológicamente”, concluía Delgado.
Esta ceutí solo pide lo que por derecho le corresponde. Desde abril llevaba primera en lista de espera, ha respetado todos los procesos, no pide ningún privilegio, solo lo que le corresponde. Exige una operación temprana porque su estado emocional se está viendo afectado.
M.Angeles has hecho lo mejor que es darle visibilidad a tu gran problema y la verdad que no es justo. No sé hasta que punto ésto te pueda ayudar, pero dilo y desahógate y que sepamos todos los ceutíes lo que estas sufriendo, no es de gran ayuda,pero es vergonzoso. A ver si fueras por lo privado si hubiera pasado todo ésto. Te mando un besito de suerte.