El juzgado de instrucción número 6 instruye la causa abierta contra los dos agentes de la Guardia Civil que fueron detenidos esta semana por miembros de Asuntos Internos, acusados de un presunto delito de blanqueo de capitales. Con los dos miembros del Instituto Armado en libertad con cargos, el juzgado requiere la justificación de los ingresos económicos localizados a uno de los dos agentes, así como el origen de las armas que fueron localizadas en una de sus viviendas (que da pie a una nueva acusación de tenencia de armas) así como de un sello, bastante antiguo, de un juzgado de Burgos.
Fuentes cercanas a este agente señalan que puede justificar tanto los ingresos económicos como el origen de las propiedades así como la posesión de las armas, que estarían en desuso pero no inutilizadas al haber sido propiedad de un familiar.
En el caso del otro guardia no se le encontraron grandes cantidades económicas ni propiedades pero se pasó desde la Policía Nacional a la Guardia Civil una información obtenida en unas escuchas telefónicas pertenecientes a otra causa judicial abierta y que fueron grabadas en 2006. Este detalle es lo que habría movido la actuación desarrollada y dirigida exclusivamente desde Madrid.
La investigación continúa abierta pero ya se ha levantado el secreto de las actuaciones.