Más de tres meses sin médico en el Centro de Salud del Recinto. Nos tienen de un médico para otro porque el que era nuestro médico, el doctor Ricardo, ya se jubiló. Muy buen médico por cierto al que echaremos mucho de menos.
Esperamos que por el bien de la salud de los pacientes, a la mayor brevedad posible el INGESA contrate a un médico que sustituya al que durante muchos años ha sido nuestro médico de familia, en mi opinión, de los mejores, siempre dispuesto a ayudar al paciente y muy atento.
No creo que haya mucho más que decir, queda todo bien claro y es bien sencillo: contratar a un médico de familia que sustituya al que se ha jubilado para que todos los pacientes, como es normal, tengamos nuestro médico de familia asignado. Al no tener un médico asignado las consultas se demoran mucho más, pues son otros médicos los que se ven obligados a sobrecargar su agenda para poder atendernos y cada día lo hace uno diferente.
Otro inconveniente de no tener médico de familia asignado es la imposibilidad de coger la cita por internet, lo que también va en perjuicio tanto del paciente como de los trabajadores que ven como tienen que atender muchas más llamadas telefónicas. No son pocas las veces que debido a la elevada carga de trabajo que tienen son bastantes las llamadas telefónicas que hay que realizar para que te cojan el teléfono.
La verdad que si que es muy buen médico, a ver si hay suerte y pronto ponen uno que lo sustituya y por lo menos que sea igual de profesional que él.