Buenas noticias para los facultativos que realizan guardias en el Hospital Universitario de Ceuta. La ministra de Sanidad, Mónica García, ha reiterado este miércoles su compromiso de abolir las guardias médicas de 24 horas sin que ello se traduzca en una disminución de las retribuciones, y para ello ha apostado por reducirlas progresivamente, comenzando por fijar máximos de 17 horas.
Así lo ha anunciado tras reunirse con la médico intensivista Tamara Contreras que el mes pasado inició una recogida de firmas para acabar con las guardias de 24 horas por los riesgos que suponen para profesionales y pacientes.
La ministra ha reconocido que es una medida "compleja" que exige una reestructuración del Sistema Nacional de Salud, para lo que es necesario modificar el Estatuto marco, algo que su departamento está "plenamente comprometido" a hacerlo antes de que acabe 2024. Pero también necesita del consenso con sindicatos, comunidades y demás actores implicados porque, ha insistido son "medidas de calado y complejas".
“Desde el Ministerio de Sanidad estamos plenamente comprometidos con esta medida, sabiendo que es una medida que es compleja y que requiere una reestructuración de nuestro Sistema Nacional de Salud (SNS)”, ha manifestado.
No va a haber una disminución en las retribuciones
Mónica García está convencida de que es "ahora" cuando se pueden hacer las reformas legislativas necesarias, pero "hay que dar cierta flexibilidad" para que este cambio estructural "se vaya dando poco a poco", de modo que se vaya "estudiando progresivamente y, de alguna manera, individualmente", cada uno de los servicios en los que se quiere modificar esta norma.
A este respecto, ha recordado que un profesional que hace una guardia un fin de semana, está trabajando 60 horas a la semana. “Esto no ocurre en ninguna otra profesión en la que se trabaje legalmente. Con estas premisas vamos a iniciar el camino para acabar con esta aberración”, ha insistido.
Como paso intermedio antes del fin de las guardias de 24 horas, la ministra ha señalado que, "en los primeros momentos", se deben jornadas de un máximo de 17 horas pero, en cualquier caso, ha querido dejar claro que nada de ello "significa que vaya a haber una disminución en las retribuciones de los profesionales".
"Lo que queremos es que trabajen bien, que ningún paciente sea el paciente al que se le atiende en la hora 23, y que se disminuyan los errores médicos que se producen por el cansancio de los profesionales. Nos vamos a poner manos a la obra", ha enfatizado.
Reforma del Estatuto Marco
Para acometer la reforma de un modelo que ha calificado de "aberración", hay que "reorganizar, reestructurar y gestionar mejor a nuestros profesionales de trabajo y sus horas de descanso", porque no hay que olvidar que "España es un país que está por encima del número de profesionales por habitante de la OCDE". No obstante, ha asumido que este modelo de guardias, vigente desde los últimos 50 años, a Sanidad le va a "costar cambiarlo porque hay ciertas resistencias".
"Las horas de guardia no computan como hora trabajada, cuando contamos esto fuera la gente no da crédito. Es un anacronismo que tenemos que empezar a cambiarlo. Y la senda es el diálogo y sobre todo la evidencia científica, pero hay que iniciar el camino poco a poco en consenso con el resto de los actores", ha insistido.
“Lo que queremos es que los profesionales trabajen bien y que ningún paciente sea el paciente al que se le atiende en la hora 23; queremos que se disminuya todo eso que la evidencia científica dice que son los errores médicos que se producen por el cansancio de los profesionales”, ha indicado la ministra.
Para ello, se va a trabajar con los sindicatos, con las sociedades científicas, con las comunidades autónomas y con todos aquellos actores implicados. Y, a la vez, ver ejemplos de otros países donde yo ya se hace y de lugares de España donde ya han quitado las guardias de 24 horas.
“Hablamos de reorganizar, de reestructurar y de gestionar mejor a nuestros profesionales cambiando un modelo con 50 años”, ha dicho, tras reconocer que existirán ciertas resistencias, pero que es necesario cambiar la situación actual por ser “un anacronismo”.
Mónica García ha destacado que el objetivo es “estabilizar a nuestros profesionales, invitar a las comunidades a que efectivamente cuiden a sus profesionales y también cuidar las horas de trabajo y el valor añadido que tiene cada uno de estos profesionales en sus horas de trabajo”.