Pionero y pícaro. Así se define José Monteoliva, más conocido como el ‘dios del Carnaval'. Peluquero de profesión, el carnaval corre por sus venas desde hace años. Vive disfrazado desde que tiene uso de razón. Su amor por esta festividad nació en su infancia a través de su madre, que lo disfrazaba todos los años.
Inspirado en los desfiles de las islas Canarias, Monteoliva confecciona sus disfraces con color, pedrería y plataformas. Aunque recuerda al estilo de las drags, asegura que sus referencias se encuentran en los carnavales canarios. Este año encarnará en las calles de Ceuta al mítico Dios Momo.
“Me he hecho disfraces hasta con bolsas de basura, telas de sacos, plásticos de colores, plumas, pedrerías o pantalones rotos. He hecho de todo”, cuenta. Todo material posible se convierte en un llamativo disfraz en las manos de este ceutí.
Monteoliva no tiene ningún traje favorito. Todos los disfraces que ha confeccionado son especiales para él. No le es posible elegir uno concreto. “Es como el que tiene cinco hijos o como elegir uno de tus dedos. ¿Cuál te vas a cortar que no te duela?”.
Sus disfraces no pasan inadvertidos, tanto que algunos se han atrevido a recrearlos. “Hay quien me ve en la carroza y quieren el año que viene vestirse igual. Muchas personas me imitan, pero soy inimitable”.
El nuevo Dios Momo se toma su tiempo para crear sus disfraces. Monteoliva se pone manos a la obra en los meses de octubre y septiembre. Todos los años, como una especie de ritual, tiene alguna nueva idea y le da vida. Este año ha tardado cuarenta horas en coser el traje perfecto. Monteoliva confiesa que no ha sido tarea fácil. “Me ha costado trabajo encontrar el material que quería para lo que llevo en la espalda”.
El espíritu del Dios Momo casa con su personalidad. Esta entidad divina, que representa la burla, el sarcasmo y la agudeza es el alma máter del ceutí. Él considera que estos rasgos son parte de su forma de ser. “Soy un pícaro. Soy así, divertido. Así seguiré y nunca cambiaré”.
La filosofía de Monteoliva es tomarse con humor la vida. Su adolescencia la vivió en las islas Canarias, conoció un carnaval diferente al de Ceuta. “Me impactaban las plumas y el baile. Eso se quedó en mí”.
Las plataformas y los colores llamativos son indispensables en su indumentaria. “Empecé a usarlas cuando no existía el tema drag. Eso salió a raíz de Las Palmas de Gran Canaria. La elección de las drags fue hace unos 20 años. Yo me ponía tacones mucho antes”.
Monteoliva ha recibido muchos galardones por sus disfraces a lo largo de los años. “Cuando me daban la placa del premio siempre me decían ‘el dios del carnaval’”. Ahora, este es su apodo y su nuevo personaje en el desfile de este año.
La música acompaña en los carnavales al rey Momo. Se centra mucho en géneros dinámicos y rítmicos como la batucada. Él no se ha lanzado al mundo de las chirigotas y de las comparsas. Su dedicación al disfraz y al desfile es plena.
Es el primer carnavalero de su familia. “Desde pequeño mi madre me ha disfrazado”, comenta. La recuerda con nostalgia. Ella lo ayudaba siempre en estas fechas y disfrutaba al verlo disfrazarse.
Monteoliva pisó por primera vez el desfile ceutí en el año 83. “Hice la mili. Estaba de legionario. Se me ocurrió disfrazarme de enfermera porque mi abuela estaba ingresada en el hospital”.
El nuevo Dios Momo espera en este carnaval diversión y que las personas disfruten con él y él con ellos. Plumas, purpurina y plataformas serán, de nuevo, su sello de identidad. Un desfile que no dejará a nadie indiferente.
Que lo disfrutes, tío !!!
A mi no me gusta el carnaval, soy muy soso, pero me encanta ver a la gente entusiasmada con lo que disfruta.
Feliz fiesta a todos !!!
Grande José