Otro caso de intento de contrabando de drogas ha llegado este lunes al puerto de Algeciras en ferry. Agentes de la sección fiscal de la Aduana de Algeciras han detenido a un ciudadano marroquí como presunto autor de un delito contra la salud pública cuando desembarcaba con un turismo procedente del puerto de Tánger. En el interior del vehículo, se escondían más de 500 kilos de resina de hachís valorados en más de 800.000 euros.
Los agentes del control de cabotaje que realizaban sus labores de resguardo fiscal sobre los vehículos procedentes Tánger-Med, Marruecos, identificaron al conductor y propietario de un turismo que levantó sospechas entre el personal de aduanas. Miembros de la Guardia Civil sita en el desembarque, percibieron cierto grado de nerviosismo además de respuestas contradictorias ante las cuestiones que le plantearon mientras realizaban el control rutinario.
Por ello, tal y como ha informado la Guardia Civil en un comunicado de prensa, se llevó a cabo una “laboriosa inspección del vehículo, con el apoyo del servicio de rastreo con perros”. En este primer análisis, se apuntó hacia la presencia de cavidades no huecas en el coche, en distintas zonas; el can señaló los bajos de las estructuras metálicas del suelo y del maletero además de la zona interior del salpicadero, donde se encuentra la consola de mandos.
Una vez finalizado el reconocimiento con los animales adiestrados, los agentes procedieron a examinar el vehículo ellos mismos, levantando las piezas del coche que había señalado la unidad canina. Al finalizar, hallaron 919 envoltorios de resina de hachís, que sumaba un peso total de 505 Kilogramos, droga que tendría un valor en el mercado de 800.000 euros.
El detenido ya ha sido puesto a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de la Guardia de Algeciras. Se le imputa un presunto delito contra la salud pública por tráfico de drogas.