La ‘cultura del fuego’, el afán de algunos individuos por causar daños en el mobiliario público y absorber con sus andanzas el trabajo de los Bomberos, ha dejado también un rastro económico en la hilera de contenedores que han sido calcinados en todo el mes de septiembre y los primeros días de octubre.
Según los datos facilitados por la empresa Trace a este periódico, el coste de los depósitos casi llega a los 30.000 euros, en concreto las cifras son de 25.576 sin contar los casos de estos últimos días. Las quemas indiscriminadas han llamado incluso la atención a la empresa que no se había topado con una situación igual, con un pico tan alto de destrucción de contenedores en tan poco tiempo: 65 depósitos destrozados.
En datos, se han quemado 55 contenedores de 800 litros, los que son de recogida de carga trasera. Cada uno de estos contenedores cuesta 299 euros, con lo que el daño causado por el ‘vandalismo’ de estos sujetos alcanza los 16.445 euros. En ese periodo también se han quemado diez contenedores de 2.400 litros, los de recogida de carga lateral, que cuestan 913,10 euros cada uno, lo que ha supuesto un coste de 9.131 euros.
No son casos aislados, las crónicas de sucesos recogen jornadas en las que se han quemado hasta diez contenedores en una barriada que, a los pocos días y nada más ser repuestos, ha vuelto a recibir la visita de los incívicos. El Príncipe y Juan Carlos I se llevan ‘el premio’, hasta el punto de que en la primera barriada se ha generado un conflicto debido a que la empresa de limpieza comunicó a los vecinos que carecía de contenedores para ubicarlos, advirtiendo de que de seguirse en esa línea destructiva habría que poner contenedores metálicos, como el situado en la explanada del Reina Sofía.
La propia asociación de vecinos ha comunicado a los residentes que denuncien y reprochen estas prácticas, porque los propios habitantes del barrio son los perjudicados por situaciones así.
Al coste económico y al daño al vecindario se suma otro daño colateral: que estas acciones terminan absorbiendo el trabajo del SEIS provocando que mientras está controlando las llamas generadas se esté en merma de número para atender otro suceso de relevancia y que requiera la implicación de los agentes del Cuerpo de Bomberos.
Otro contenedor calcinado
El turno de noche para los componentes del SEIS ha sido "tranquilo". Según informan a este periódico, solo han realizado una salida por la quema de un contenedor en la barriada del Príncipe. Esta ha tenido lugar cerca del colegio Reina Sofía, zona a la que han acudido tras recibir un aviso de un fuego. La intervención ha sido rápida y, como es habitual cada vez que acuden a la barriada, han estado acompañados por Policía Nacional para poder realizar el trabajo en condiciones óptimas de seguridad. Y ya son 66 contenedores quemados entre septiembre y octubre.
Si han de detenerlos, que pongan cámaras cerca, costarán menos que los contenedores, y si son menores, los padres se harán cargo de los desperfectos ?.
No se trata de que pinten o no los contenedores de hierro, esto es terrorismo y no se detienen a ninguno de ellos. Y cuántos vehiculos se quemaron en los últimos meses. y nunca detienen a nadie.
360,000,00 al año.
No es una amenaza a la población directamente, es a las arcas de la ciudad, que pongan contenedores de hierro, solo costará la pintura, si se pintan.
Es terrorismo de baja intensidad.
Este tema alcanza ya una gravedad tal que la Delegacion debería darle un tratamiento especial. Se trata ya de episodios de Kale Borroka.