El consejero de Fomento del Gobierno de Ceuta, Alejandro Ramírez, someterá este miércoles a la consideración del Pleno la aprobación inicial de una Ordenanza reguladora de “estacionamientos reservados a vehículos que transportan personas con movilidad reducida” que establece que un total de al menos 16 zonas de la ciudad, las consideradas “centros de actividad de los núcleos urbanos”, deberán disponer de “al menos una plaza de aparcamiento por cada cuarenta reservada y diseñada” para su uso por parte de personas titulares de la tarjeta que las identifique como poseedoras de una discapacidad que las sitúe en “clara situación de desventaja respecto de los demás para realizar un gran número de actividades cotidianas y, de forma particular, para acceder a los espacios y servicios comunitarios”.
Entre esas zonas se encuentra en área de las Murallas Reales-Asamblea y Mercado Central; el entorno del Paseo del Revellín y el del ‘Ceuta Center’; la zona de la Delegación; el Campus Universitario; el Tanatorio; los alrededores del Centro de Salud de Recinto; el corazón de Hadu; y el área del Hospital, entre otras.
Además de las zonas establecidas expresamente como “centro de actividad en núcleo urbano” se podrá reservar para el uso por parte de personas con discapacidad plazas de estacionamiento “en aquellos equipamientos que por su gran afluencia de público, por interés general, por su singularidad u otra condición” se considere pertinente.
Las solicitudes de este tipo de reservas podrán ser tramitadas mediante solicitud genérica ante el Registro de la Ciudad e irán dirigidas a “vehículos adscritos a personas discapacitadas que presenten movilidad reducida por discapacidad motórica igual o superior al 33% administrativamente reconocida”.
Al margen de las limitadas para su utilización general por parte de ese colectivo, cuando una persona con ese perfil sea el conductor de un vehículo que deba utilizar para su actividad podrá pedir una reserva de aparcamiento “lo más cercana a su domicilio o lugar de trabajo habitual para el desempeño de su profesión”. En estos casos se deberá probar no disponer de un garaje privado y el horario será limitado a la jornada laboral.
Para ser beneficiario de una reserva de estacionamiento para vehículos adscritos a personas con discapacidad de uso exclusivo el solicitante deberá “justificar sus graves problemas de movilidad” y estar en posesión de la tarjeta específica, así como no disponer de un garaje en el inmueble que constituya su lugar de residencia habitual o domicilio de trabajo.
También se exigirá que el recorrido peatonal accesible desde su oficina a la plaza asignada no sea superior a cien metros y que no haya tenido “ninguna sanción” a lo largo de los dos últimos años por “mal uso” de la tarjeta de estacionamiento, así como que sólo la use para sí.
Alejandro Ramírez propondrá este miércoles al Pleno aprobar inicialmente una Ordenanza reguladora de la tarjeta de estacionamiento de vehículos automóviles para personas con discapacidad con el fin de establecer el marco normativo de su concesión a quienes presenten movilidad reducida dictaminada oficialmente (o no si se dan “razones humanitarias”) o problemas de agudeza visual.
Los carnés estarán expedidos a favor de la persona que reúna los requisitos “para su utilización en los vehículos que use para sus desplazamientos”.
Será “única, personal e intransferible” y sólo se podrá utilizar para aparcar en las plazas de estacionamiento reservadas “cuando la persona titular conduzca un vehículo o sea transportada en él”.
Los usuarios también tendrán derecho a parar “en cualquier lugar de la vía por motivos justificados y por el tiempo indispensable”, estacionar en zonas de carga y descarga sin ocasionar perjuicios o acceder a espacios con circulación restringida para residentes.
Podemos también apoya la reforma de una Ordenanza municipal obsoleta respecto a las tarjetas especiales dirigidas a los estacionamientos reservados a personas con diversidad funcional, donde hay que distinguir entre los aparcamientos y los vados, encontrándose con la problemática en muchas ocasiones de que las plazas están ocupadas por personas que carecen de autorización para ello o hacen un uso indebido los convivientes del discapacitado. La formación aclara que las tarjetas de aparcamiento las concede Servicios Sociales y los vados la LODIU (Fomento).
En este sentido, el secretario general de Podemos de Ceuta y Unidas Podemos, solicita que, se concedan vados y tarjeta de aparcamiento al conductor discapacitado que supere los seis puntos de reducción de movilidad y el 33% de discapacidad marcado, sin necesidad de convivientes y sin tener que ajustarse a otras definiciones por parte de ambas consejerías y sin más ambages.
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