Una abarrotada Plaza de España recibió la tradicional ‘Zambombá’
de la Hermandad del Rocío de Ceuta. Los integrantes del coro estuvieron en todo momento entregados a los villancicos que tocaron con un toque aflamencado. También el público: niños, adultos y mayores estuvieron muy participativos. No faltó ningún ingrediente para que la fiesta fuera un éxito desde el instrumento protagonista: la zambomba; hasta la lumbre para calentar, tal y como manda la antigua usanza, y los dulces típicos de la época y el anís para animar la voz y el cuerpo. La ‘Zambombá’ del Rocío es toda una tradición en la ciudad. Al acercarse las fechas navideñas los villancicos más rocieros toman la calle durante una tarde. Cante y baile de todos los participantes para celebrar que la Navidad ya está aquí.
El origen de la fiesta
La ‘Zambombá’ tiene su origen en el s.XVIII y su lugar en las tierras jerezanas de la vecina provincia. Estaba concebida como una reunión que se organizaba en las casas de vecinos. Al hacerse de noche se congregaban para cantar villancicos y canciones tradicionales. Eso sí, siempre con aires aflamencados y con la presencia del instrumento que da el nombre a la fiesta: la zambomba. Todo esto se acompañaba y se endulzaba con los productos más típicos de estas fechas navideñas como son los turrones, mazapanes, polvorones y, por supuesto, sin faltar los vinos finos y olorosos para animar y calentar la noche. En la 'Zambombá' todos participaban, ya que los artistas no eran los únicos que actuaban. Todos los asistentes podían llevar sus instrumentos y en un momento dado animarse al cante y al baile.
La 'Polvoroná', otro evento tradicional
Este evento se suma a todos los ya celebrados como la ‘Polvoroná’ chican y grande celebradas estos pasados lunes y martes respectivamente, donde cantaron los coros de Navidad del pasado concurso de coros. Además de las cenas del mayor programadas en dos turnos: este miércoles y este jueves. También el jueves, el Concierto de Navidad del Conservatorio Profesional de Música en el Auditorio del Revellín.