VOX Ceuta elevará en el próximo pleno una propuesta para que se ponga en marcha un inventario general del Parque Inmobiliario Local -viviendas, locales o garajes- que figuren en el registro como de Titularidad Pública, con identificación de la situación jurídica, estado y ocupación de los bienes inmuebles inventariados.
Desde la formación creen que aunque es de público conocimiento cuáles han sido las distintas fases de viviendas catalogadas bajo la denominación de VPO que han sido construidas en los últimos años, “muy poco se conoce” de la situación jurídica y del estado de ocupación de estas viviendas, una vez se procede a su adjudicación.
De igual modo también consideran “esencial” el conocimiento por parte de la Administración Local, de la actual situación en la que se encuentran todas aquellas viviendas que, figurando registralmente como de titularidad pública, fueron construidas hace años, caracterizando la expansión urbanística de Ceuta en las últimas décadas y que vinieron a configurar la fisonomía estructural de la mayor parte de nuestras barriadas “y de las que hoy se tiene muy poca información”.
“Es por todo ello que en Vox creemos que dada la situación generada en Ceuta como consecuencia de los diferentes escándalos, muchos de ellos en fase judicial, derivados de la mala gestión del asunto por parte del Ejecutivo Local, es imprescindible, en aras de la transparencia y de una gestión eficaz de los recursos públicos, que el Gobierno de la Ciudad ponga en marcha un inventario de estas características”, expresa la formación.
Vivienda: uno de los caballos de batalla del partido
El pasado 17 de julio, Vox ya reclamó una nota de prensa difundida a medios una relación de viviendas de construcción ilegal asentadas sobre suelo público que existen en Ceuta.
La vivienda es uno de los frentes en los que la formación se ha embarcado para acabar, según aseguró su portavoz, Juan Sergio Redondo durante el Pleno, con la "usurpación" de suelo público que se viene produciendo en Ceuta y la “proliferación” de infinidad de construcciones ilegales, que arrojan cada vez con más fuerza “una imagen totalmente tercermundista” de la ciudad.