El Grupo Parlamentario
Vox-Ceuta va a llevar al Pleno de la Asamblea una propuesta para impedir que los imames “al servicio de Marruecos” ejerzan su actividad en la ciudad. Recuerda la formación que ya en su última visita a la ciudad el presidente de Vox, Santiago Abascal, alertaba de que existen políticos y ciertos sectores ciudadanos ”que sirven a los intereses del Reino de Marruecos tanto por acción como por omisión”. Por ello, la formación propondrá en el próximo pleno que los imames islámicos al servicio del Gobierno de Marruecos, o de terceros países, no continúen ejerciendo su actividad en la ciudad. Insiste así la formación en aludir a supuestos promarroquíes en sus propuestas. El partido resalta que uno de los elementos “que marroquinizan nuestra ciudad” es el hecho de que cerca de la totalidad de los imames que ejercen su actividad en mezquitas de Ceuta “están dirigidos y contratados por el Ministerio de Asuntos Religiosos de Marruecos”. Vox sostiene que este hecho implica “un riesgo” que da lugar a la “propagación de mensajes e ideologías impulsadas por Mohamed VI” de forma estratégica en nuestra ciudad con intención de “avanzar hacia su continua reclamación” infundada de la soberanía de Ceuta.
Discurso en las mezquitas reconocido por Marruecos
Por todo ello, la formación propondrá instar al Gobierno de la Nación a que, en colaboración con la Ciudad Autónoma, impida que imames al servicio de Marruecos, o de terceros países, continúen ejerciendo su actividad en las mezquitas de Ceuta. Este asunto que lleva Vox a pleno no destapa nada, de hecho siempre Marruecos ha reconocido que paga históricamente a imames dentro de la tarea de difusión de un islam moderado y promoviendo combatir así el extremismo. De esta manera se evita además cualquier intrusión de discursos anómalos que no cuadran con la realidad.