La candidata al Congreso por
Vox-Ceuta, Teresa López, denuncia que “tanto al Gobierno como a diferentes oenegés y entidades les interesa tener entradas de
menores extranjeros no acompañados porque se ha
convertido en un negocio”. Así lo denuncia en una nota de prensa remitida a los medios de comunicación en la que indica además que “los
centros de menores de la península piden traslados de menores a sus centros por que supone más puestos de trabajo para las empresas que los abastecen”. Es la conclusión que sacan después de que el pasado miércoles giraran visita al centro para conocer sus instalaciones. Visita que han aprovechado básicamente para acusar a Pedro Sánchez de provocar un efecto llamada, ya que en ningún párrafo del comunicado aluden a mejoras que habría que llevar a cabo o a narrar el trabajo que el área de Menores realiza en este lugar. Desde 2018, dice Vox, se han contabilizado 4.097 entradas, más del 90% de marroquíes. En la actualidad hay 60 menores. Para López “es llamativo que en 2018, coincidiendo con la llegada de Sánchez al Gobierno, se registrara el mayor número de llegadas de menores extranjeros a Ceuta. Demuestra la política de efecto llamada y de tráfico de menores que existe desde
Marruecos a España a través de Ceuta”, denuncia.
El mensaje que dan los candidatos a las elecciones generales
Los candidatos a las elecciones generales del 23 de julio, Teresa López -Congreso-, y Yolanda Merelo y Carlos Verdejo -Senado-, visitaron el centro para “conocer la situación en la que se encuentran las instalaciones, así como el equipo, después de haber pasado por momentos de sobreocupación tras la invasión de inmigrantes que sufrió Ceuta en 2021, llegando a acoger a más de 400 menores cuando su capacidad máxima son 60 plazas”, avanzan en la nota. No obstante en el mismo comunicado no añaden ni propuestas ni alternativas ni concretan nada de lo que hayan visto sino que solo cargan por la presencia de los que etiquetan como MENA. Muestran “especial preocupación” por las cifras de ingresos. “En 2018 se registraron 1.058 ingresos, en 2019 un total de 979, en 2020 la pandemia los rebajó a 288, y un año después, con la invasión, llegaron hasta este centro 1.400 menores, mientras que en 2022 los ingresos fueron 288 y en lo que va de año han sido 84”, exponen, trasladando datos que ha facilitado el propio centro de menores. “La cantidad de recursos económicos que destina España para atender a MENA no se puede seguir sosteniendo”, advierte López, para señalar que es necesario “aplicar la devolución de menores” para “evitar que los menores acaben malviviendo en las calles”. Eso sí, puntualiza, “hay que hacerlo conforme a la ley y al derecho, no como se hizo aquí tras la invasión”. “Esto no es protección a la infancia, si no todo lo contrario, porque no tienen un hogar estable y muchos de ellos ni siquiera quieren estar en los centros y por ello se acaban fugando”, apunta López. Mientras, Verdejo hace hincapié “en la ingente cantidad de recursos que reciben entidades no gubernamentales para la atención de MENA. Es el caso de la Fundación Raíces que tiene una subvención de millón y medio de euros para facilitar la inserción en el mercado laboral de una treintena de estos menores”.