“La Virgen de África simboliza el amor en su máxima expresión”

Juan Vivas, presidente de la Ciudad: “La Virgen de África simboliza el amor en su máxima expresión”

Quiero aprovechar, en primer lugar, la oportunidad que me dais a través de estas líneas para poner de manifiesto mi agradecimiento, admiración, cariño y devoción hacia nuestra querida Cofradía de Caballeros, Damas y Corte de Infante de Santa María de África, con su hermana mayor, María del Carmen Pasamar, a la cabeza, respaldada por toda su Junta de Gobierno. Una hermandad que se esfuerza cada día por mantener vivo el fervor por nuestra Patrona, a la que tanto debemos y a la que tanto amamos. Así se está demostrando un año más, a pesar de las limitaciones sanitarias en beneficio de todos, con la Novena y con la organización del resto de actos conmemorativos en su honor.

La Virgen de África es un símbolo para Ceuta, su presencia en esta tierra, desde hace más de 600 años, simboliza el amor en su máxima expresión. Nuestra ciudad se enfrenta actualmente a uno de los trances más difíciles de nuestra historia reciente; por ello, los ceutíes necesitamos ahora, más que nunca, de su protección y amparo.

El aciago año 2020 nos impidió celebrar las fiestas en honor a nuestra Patrona, tal y como ella merece y tal como había sido tradición durante muchos años. La COVID-19 ha provocado un reguero insoportable de víctimas mortales que ha sumido en el dolor y en el sufrimiento a muchas familias ceutíes. Para ellas, nuestras condolencias y nuestro deseo de que encuentren el consuelo que tanto anhelan. A pesar de los avances notables en la vacunación, continúa siendo muy necesario que seamos precavidos para preservar y garantizar la salud de los ceutíes.

Este año 2021 ha venido marcado además por los acontecimientos de los pasados días 17 y 18 de mayo, jornadas en las que Ceuta, desbordada e indefensa, tuvo el alma en vilo y estuvo al borde del abismo. Nuestra ciudad no ha retornado a la normalidad y continúa sufriendo las consecuencias de lo sucedido pero, a pesar de ello, estoy convencido de que nuestra tierra sabrá hacer de la necesidad, virtud; de que resistirá y se levantará para salir reforzada.

Para ello, contamos con el abrigo protector de nuestra Alcaldesa Perpetua, máxime en un año en el que se conmemorará, el próximo mes de noviembre, el 75 aniversario de la Coronación Canónica de Santa María de África. Una efemérides, sin duda, imperdible y para la que ya se prepara la hermandad que, recientemente, ha presentado la esperada restauración del manto azul de nuestra Patrona, un manto que ya luce en todo en su esplendor y en el que se reflejará, además, el nombre de muchos devotos que han querido aportar su granito de arena a tan noble causa.

Termino reiterando que la Cofradía de África, y todos los que la integran, continuarán contando con nuestra colaboración en todo lo que sea menester, rogando para que, en próximas fechas, nuestra querida Virgen de África pueda recorrer las calles de su pueblo, de ese pueblo que anhela reencontrase con ella y volverla a llenar de pétalos como muestra de un fervor que, lejos de mermar, crece cada día.

Alejandro Escámez Fernández, comandante general de Ceuta: “Me uno al deseo de que la Virgen de África nos traiga un futuro esperanzador”

or segundo añ̃o consecutivo deberemos homenajear a nuestra Patrona con el recogimiento que nos impone la ya larga pandemia que parece vislumbrar su final, y sin la completa brillantez de años precedentes. Pero estoy seguro que nada de eso restará devoción, pasió́n y regocijo, pues como protectora de nuestra Ciudad desde hace má́s de 600 añ̃os, ha extendido su manto, una vez má́s, para que el rigor de la difí́cil situació́n no fuera tan gravosa.

Como Comandante General de Ceuta, y en nombre de todos los componentes de la guarnició́n militar, me uno al sentir y ruego de todos los ceutíes para que nuestra Virgen de Á́frica nos traiga un futuro esperanzador, donde los problemas sanitarios, econó́micos y sociales se mitiguen y la alegría sea la señ̃a de identidad de estos dí́as de celebració́n mariana. En este sentido, la Comandancia General de Ceuta seguirá́ estando al servicio de la sociedad, cuando sea preciso, para ayudar a paliar cualquier situació́n compleja que debamos afrontar.

Tambié́n quiero dedicar unas liíneas a nuestra querida Cofradí́a de Caballeros, Damas y Corte de Infantes, que aunque este anño tampoco podrá organizar con normalidad todas las tradicionales ceremonias en honor a la Virgen de Á́frica, me consta que su trabajo y desvelos son dignos de resaltar, felicitá́ndoles por ello y animá́ndoles a seguir con la misma ilusió́n y entrega de siempre con su nueva Hermana Mayor al frente.

Igualmente agradezco a este medio de comunicació́n la oportunidad que me brinda para poder felicitar a todos los que son o se sienten ceutíes y desearles unas entrañ̃ables y dichosas fiestas patronales, en las que todos disfrutemos en familia, con sosiego y en afectuosa concordia.

Termino con el ruego a Nuestra Senñora la Virgen de Á́frica para que nos siga guiando y protegiendo en nuestros quehaceres y decisiones y que nos ayude a preservar y actuar conforme a los valores morales que sustentan nuestra sociedad, y con ello poder superar cuantos obstá́culos nos encontremos, aliviándonos los problemas y dificultades presentes y futuros.

¡Felices y bienaventuradas celebraciones Patronales!

Salvadora Mateos, Delegada del Gobierno en Ceuta: “A pesar de las circunstancias miraremos el futuro con todo el optimismo”

Queridos ceutíes:

Por segundo año consecutivo y, debido a la situación de la pandemia, este año tampoco podemos celebrar nuestras fiestas patronales en honor a la Virgen de África. Estoy segura de que será el último gracias a las vacunas.

Todos tenemos presente que con la llegada del mes de agosto hay una cita obligada en nuestro calendario, el día 5, festividad de la Virgen de África.

En nuestro pensamiento estos días de especial relevancia no van a pasar desapercibidos. Nos acodaremos del colorido de nuestro Real de la Feria, del enloquecedor ruido de las atracciones y de la música de cada una de las casetas en ese punto de encuentro que, para los y las caballas y quienes nos visitaban en estos días, ha venido suponiendo la zona del Parque Juan Carlos I.

Y también, como es lógico rememoraremos a la Virgen de África procesionando por nuestras calles y a esa ofrenda floral que nos reunía por millares en el entorno del templo que la custodia.

A pesar de las circunstancias miramos al futuro con optimismo porque somos un pueblo que sabe reinventarse a sí mismo y somos conscientes de que solo unidos podemos ganar esta batalla.

Quiero hacer un especial llamamiento a nuestros jóvenes. No es la primera vez que me dirijo a ellos. Les pido un último esfuerzo. Respetad las normas y evitad situaciones de riesgo.

Apelo a vuestra responsabilidad ya que con vuestra implicación podremos acabar definitivamente con este virus y volveremos a la normalidad, a celebras nuestras fiestas.

Somos un pueblo que históricamente ha pasado por muchas situaciones difíciles y siempre ha sabido superar las dificultades. Y lo vamos a volver a hacer.

Valores como la fraternidad, la solidaridad y la esperanza tienen hoy más significado que nunca. Son nuestro mejor patrimonio. La Virgen de África es el símbolo de estos valores.

Vamos a salir fortalecidos pero para ello es preciso el compromiso de todas y de todos.

Tenemos por delante un futuro lleno de posibilidades que vamos a saber aprovechar. Formamos parte de una sociedad plural donde la convivencia es el eje que ha articulado nuestras relaciones y así va a continuar siendo, gracias al esfuerzo colectivo de todo el pueblo de Ceuta.

Viva la Virgen de África

Viva Ceuta

D. Francisco Jesús Fernández Alcedo, vicario del Obispado de Ceuta: “No deseches la oración que te dirigimos en nuestras necesidades sino más bien líbranos de todo peligro”

Los momentos difí́ciles y dramá́ticos que vivimos, la devoció́n a la que es nuestra Madre y Patrona nos lleva a repetir incansablemente: “No deseches las oraciones que te dirigimos, en nuestras necesidades, antes bien líbranos de todo peligro, ¡oh Virgen gloriosa y bendita!”.

La propuesta de Marí́a es la de un Dios que llama a la puerta del corazó́n del hombre, no como enemigo de la felicidad y libertad humanas, sino como amigo que viene a traernos la esperanza y la respuesta a lo que somos y lo que estamos llamados a ser. Con la aceptació́n de esta oferta de salvació́n la persona encuentra el sentido de su vida y responde decididamente al plan de Dios.

Nos llegan momentos de especial dificultad, de sombras y desá́nimo. Pero estemos alegres y vivamos con optimismo. El verdadero devoto de la Virgen sabe que todas las notas, aún las desganadas y distorsionadas, tienen cabida en el plan de Dios. Porque, al final, aparece y prevalece alguna armonía: “La disonancia pude ser redimida sin ser destruida”.

La historia de la salvació́n, en la que estamos inmersos, es como una gran sinfoníá capaz de abrazar hasta nuestros errores, equivocaciones y pecados, y en la que al final, la belleza y la armoní́a triunfan. No es que Dios borre las notas desganadas o niegue su existencia, sino que Él encuentra su lugar adecuado dentro de una bella sinfonía redentora.

No mires las dificultades, mira los apoyos, que Dios nunca te va a poner donde su brazo no te pueda sostener. Y si son tantas las dificultades, y se apagan todas las luces y si las mejores intenciones decaen, recordemos siempre el amparo de Santa María de Á́frica.