Abro los ojos y veo una claridad. Esa que me da alas para levantarme. Deseo ver un nuevo día. Y saber lo que me tiene preparado. Yo imagino un mundo nuevo. Con ideas renovadas. Donde sólo el amor haya por bandera. Esa que mueve por la fuerza de los vientos. Que bonito es todo visto desde unos versos. Esos que salen de nuestros adentros. Yo intento que todo sea así. Con sentimientos encontrados. Que sean una forma de decir al mundo: “¡Os quiero!”. Pero se que nunca podré expresar mis cosas. Sería como ponerme un dedo señalandome. Y más de uno pensaría: “Hay está otro loco. Otro que cree que todo esto es fácil”. Y no pongo en duda está afirmación. Pero sí se que si nos portáramos mucho mejor este lugar llamado Tierra sería otra cosa. Eso que en las Sagradas escrituras dicen el paraíso Terrenal. Mucho futuro vio. Pero el presente es diferente.
Mucha competencia hace que seamos un grupo reducido a hacer cosas preestablecidas. Nadie puede salirse del molde. Yo propongo una sola cosa. Que intentemos cada día ser mejores. Busquemos soluciones para todo. Y más para los que necesitan unos cuidados especiales. No cuesta nada sólo un poco de colaboración. Y así puedo pensar que un nuevo día ha llegado para que busquemos algo en que luchar. No sólo para empezar una rutina. Sino decir yo quiero algo y lo voy a conseguir. Un abrazo querido lector.
PD: Y confió que estas palabras que han sido hilvanadas, pespunte a pespunte, desde los brazos de un enamorado de la belleza de la palabra, no caigan en un saco roto. Sino que sea el inicio de un comportamiento social educado y con vistas de buscar una nueva apuesta para la convivencia. Esta que nos está costando hoy por hoy muchos contagios y vidas humanas. Sólo pensamos en buscar la felicidad. Y hay muchas formas. Para eso hemos puesto en marcha los wasap para buscar estar más unidos. De momento no hay otra salida. Ayudarnos por este medio. Y lo más apremiante hacer favores sin esperar nada a cambio. Sólo encontrar que todos estemos bien en esta vida que nos ha tocado vivir.