La vida es bella

Aunque mis CAÑONAZOS se vistan de tristeza, pesimismo, ironía, sarcasmo, existencialismo, derrotas anunciadas, guerras, hambre, genocidios, matanzas, ladrones de guante blanco, políticos corrompidos, malas personas que tratan como cosas a otras personas, insolidaridad, abuso, egoísmo y un etcétera que me llevaría a los cientos de cañonazos publicados; no es lo que parece. Y os voy a contar.

Ayer, mi compañero y amigo Carlos me dijo que no le gustaba el enfoque que le había dado al último CAÑONAZO, “Mierda” en el que argumentaba los distintos usos de la palabra contextualizándola en situaciones diversas viendo sus múltiples significados.

María Moliner consiguió crear el primer diccionario de uso; la idea detrás de este diccionario era la de elaborar una obra que además de explicar el significado de las palabras en castellano, expusiera cómo se usaban.

Yo, jugando con el lenguaje, la crítica y la denuncia, estilo Mariano José de Larra, me apunté al trabajo de esta filóloga.

Carlos me decía que suelo ser negativo y que mi visión de las cosas oscurece la luz, la esperanza y esa lucha por ser cada día mejor; no es así.

Agradezco a mi tocayo este toque de atención, aunque en la metafísica de mis reflexiones subyace la belleza, el compromiso, la solidaridad, la libertad, el respeto y una cadena humana de millones de kilómetros en el que cada miembro de la sociedad es un eslabón sujeto a otro.

La vida es bella porque no hemos perdido la capacidad de ver a miles de estudiantes acampar en las universidades para parar al gobierno genocida de Israel.

La vida es bella cuando podemos comer, venir al instituto, tener una casa, un sistema educativo, derecho a la sanidad, derecho a becas, pensiones.

La vida es bella cuando no nos arrebatan el derecho a denunciar, el derecho a hablar de tu opción sexual sin ser perseguido, el derecho a votar, el derecho a expresar tus ideas, el derecho a ser defendidos por las leyes... y otros tantos derechos que implican obligaciones.

La vida es bella si quieres extender esas conquistas a la humanidad, la vida es bella si reaccionas, si te conciencias, si piensas en tu fuerza, en el camino que vas trazando para que otros anden.

La vida es bella cuando sabes que dentro de ti has plantado semillas que serán bosques, has salido a flote cuando no has dado nada por perdido y ahora te toca rescatar a los náufragos.

"Mis artículos intentan poner alerta a los que piensan que solo esa belleza les pertenece a ellos"

La vida es bella porque tienes muchas llaves que abren muchas puertas.

La vida es bella cuando te emocionas y te quedas sin palabras viendo a tus hijos pensando en el futuro y a tus padres que son raíces bajo tus pies.

La vida es bella porque vivimos en un paraíso sin la manzana de Adán y Eva, sin la serpiente, sin el pecado, sin sentir el peligro de ser expulsados del paraíso.

La vida es bella a cada instante, en este momento, aquí y ahora porque somos como los protagonistas de “la sociedad de la nieve que se juran ser una piña

La vida es bella cuando me recibe mi perra, cuando me mira para darme las gracias y pedirme que no la deje nunca.

La vida es bella tomando un café en las balsas, cuando me pasó por El Faro a recoger el periódico, cuando paso horas en el parque canino charlando de todo con los que allí estamos mientras vemos a las mascotas saborear el agua, el césped, el juego, la manada que eligen, el acercarse para una caricia o para un premio.

La vida es bella cuando pones empeño a que esa belleza sea compartida por todos aunque tardemos siglos.

La vida es bella cuando veo a mí compañero, a mí tocayo, tener el instituto a pleno funcionamiento: aulas, instalaciones, luces, paneles, mobiliario, aparatos eléctricos, enchufes, persianas, eventos que precisan aparatos de sonido o proyección de imágenes. Y cada jornada empieza de nuevo.

Yo sí me doy cuenta, sí me digo que esto merece la pena y que no me hace falta ni un Dios ni un Cielo. Tú haces falta, él hace falta, ellos hacen falta, todos hacemos falta para la belleza de la vida.

Mis artículos intentan poner alerta a los que piensan que solo esa belleza les pertenece a ellos.