“La oscuridad le viene como anillo al dedo a la delincuencia
en Villa Aurora”. Con esta frase una de las vecinas de esta barriada de Ceuta describe una situación que llevan tiempo denunciando los afectados y que en su caso en particular ha resultado
en daños a su vehículo en dos oportunidades tras intentos de robo. El coche de Rachida ha sido objeto de
dos intentos de robo, siendo el más reciente durante la madrugada del pasado jueves para viernes. Para cumplir con su cometido, los delincuentes partieron uno de los vidrios traseros, el del lado izquierdo, y aunque no se llevaron nada de valor, queda la impotencia por lo ocurrido más la molestia de todos los trámites y diligencias para hacer
la respectiva denuncia y solventar el problema. “Es una pérdida de mañana, no me han robado nada de valor porque no suelo dejar nada de valor, pero nada más llevar el cristal a la aseguradora, aparte es un coche que tiene sus años, el cristal me cuesta buscarlo y nos dijeron que al menos un mes”. Esto significa un inconveniente para la afectada tomando en cuenta que es un vehículo en el que se mueve ella con sus tres niños para las actividades extraescolares, entre otras. Además, ha lamentado que los pequeños tengan que pasar por esta situación y darse cuenta de lo que ocurre. Y es que están tan al tanto del hecho que le han preguntado a su madre: ¿Por qué nos hacen esto?
“Cuando yo aparqué el coche para cogerlo al día siguiente eran sobre las ocho y media de la noche y no sé si pasó eso de madrugada, pero a las ocho y media de la mañana, cuando fuimos a recogerlo para llevar a los chicos al colegio nos dimos cuenta”, ha contado la afectada que asegura que son varios los vecinos que han sufrido lo mismo a falta de otro sitio donde poder aparcar sus coches. “Nos arriesgamos a ponerlos ahí, pero a ver
si el Ayuntamiento pone más puntos de luz”, ha dicho la mujer al tiempo que ha recordado que esta petición la han estado haciendo desde hace ya un año sin ningún tipo de respuesta. Y es que los vecinos de la barriada estacionan sus coches en un descampado cercano a las viviendas, un lugar que durante la noche queda completamente a oscuras a merced de los delincuentes que hacen de las suyas aprovechando la falta de iluminación en esta zona y en otras de
Villa Arora. “Hubo una subvención de unos treinta mil euros para la barrida, para que se acomodara y se hicieran cosas de las que carece la barriada”, ha señalado la afectada. Pero el problema, según ella, es que no ha habido mayores cambios, mucho menos con las farolas que necesitan luz. Dice que aparte en la calle que usa para llegar a su casa no hay luz y que ya a las ocho de la tarde no se ve absolutamente nada.
La mayor molestia de esta vecina y de otros cuyos vehículos han sido víctimas de la delincuencia, es que ya se han referido al problema en varias oportunidades, “esto tiene denuncia y escritos presentados a la Ciudad para que ilumine esa zona donde aparco porque está muy oscura”. “Yo tengo 36 años, yo he nacido aquí, soy de Villa Aurora, y recuerdo a mi madre haciendo los escritos y todavía están las farolas sin el mecanismo para la luz”. Ha insistido. Rachida ha aprovechado la oportunidad para denunciar también que
a pesar de los recursos aprobados para la barriada, esto solo se ha traducido en “unas manos de pintura, algunos boquetes tapados, unas 30 baldosas y un murito, para callar bocas porque se acercan las elecciones”.