Hace unas semanas, “una moto a toda velocidad se llevó por delante dos coches”.
Residentes en el Recinto reiteraron ayer su solicitud elevada, por distintos cauces, a la Ciudad Autónoma y a la Dirección General de Carreteras del Ministerio de Fomento en la cual plantean la necesidad de dotar de más badenes a la calle Recinto Sur ya que, entre el final de Santander y las Escuelas Prácticas, “los vecinos soportamos auténticos rallies” –carreras de vehículos–.
Esta queja vecinal viene de lejos alimentada por los accidentes de tráfico y atropellos que se suceden en esta zona desde hace años. Una de estas residentes señaló que, a finales de noviembre, un joven circulaba “a tal velocidad” con su moto que acabó “llevándose por delante dos coches”.
El Pleno de la Asamblea aprobó en diciembre por unanimidad una propuesta del PSOE para instar al Gobierno de la Ciudad a la colocación de badenes en la entrada y la salida de la barriada de Juan XXIII. Ocasión que los partidos de la oposición aprovecharon para criticar la falta de ejecución de idénticas medidas en Hadú o Poblado de Regulares. Conocedores de este debate, residentes en el Recinto criticaron que su barriada quede excluida de estos planes.
La Red de Carreteras del Estado en Ceuta incluye la N-352, una carretera nacional que por sus características de vía urbana en diversos tramos conlleva la asunción de un importante tránsito peatonal. Este extremo, que también ha sido valorado por los vecinos consultados, tampoco eximiría al Ministerio de Fomento a tener en cuenta su solicitud porque esta carretera sería de su competencia.
Hace poco más de un año, a la altura del punto conocido por el depósito de agua, un coche atropelló a una perra, Niebla, de 30 kilos, la cual fue lanzada a 21 metros de distancia tras el impacto que la mató en el acto. Solo dos días después, una niña también fue arrollada en un paso de cebra próximo y, “así sucesivamente”, apuntaron los vecinos. Los residentes en la barriada denuncian de forma pública las “carreras y adelantamientos indebidos a toda la velocidad” porque, destacaron, “ponen en peligro a los vecinos y a todo aquel que pase en ese momento por la zona”.