Tras un año desde que la Ciudad les notificase y llevase a los tribunales el desalojo de sus casas, los vecinos de González de la Vega número 4 no cejan en su empeño de que la Administración local encuentre una solución acorde a sus necesidades. No aceptan el desalojo a cambio de una ayuda al alquiler, sino que quieren que se cumpla con la promesa que les hicieron en su día, cuando los alojaron en este edificio, ahora en ruinas,
con el compromiso de que fuera una situación temporal, hasta que se edificaran nuevas promociones de VPO. Esas promociones se hicieron, pero nunca los reubicaron y ahora, a un año de ser notificados, dicen encontrarse en la calle y sin una respuesta por parte del Ejecutivo local. Estos vecinos no quieren una casa nueva, sino que les reubiquen en un lugar digno, como en su día les prometieron.
Uno de estos vecinos afectados es José Manuel Machuca, con tres hijos, entre ellos una niña con una discapacidad del 48%, y una renta mínima de 322 euros. Desde su punto de vista no entiende cómo la Ciudad ha podido llegar al extremo de judicializar esta situación sin aportarles una solución. “El Ayuntamiento no nos quiere dar una vivienda. Ellos desahucian y ya está”, lamenta.
Reconoce que están viviendo una situación de intranquilidad, ya que “uno está un poco desesperado porque no sabemos lo que el Supremo va a dictaminar”. Asegura que han sido pacientes, después de ver cómo han ido repartiendo viviendas de protección oficial a otras personas, quedando ellos siempre a la cola.
Este padre de familia insiste en que en Ceuta hay muchas casas vacías, refiriéndose al patrimonio del Ayuntamiento, una solución rápida para dar cabida a todas las familias que tienen necesidad y que viven en este bloque.
“No sabemos ni lo que van a hacer con nosotros”, comenta Sergio García, que vive con su mujer y sus cuatro hijos desde hace ya 14 años allí. “Mi mujer nació en este piso, no somos ocupas”. Este vecino, al igual que el resto, creen que todo este proceso viene derivado de un interés por parte del Ayuntamiento de vender la propiedad. No se aferran a las viviendas, sino que piden una solución a su situación, ya que desde que están allí, supuestamente de forma temporal, han hecho entrega ya de cuatro promociones de VPO.
“Queremos que se soluciones, que el señor Vivas se ponga las pilas, igual que antes de las elecciones nos dijo que nos iba a quitar la denuncia”, incidiendo en que ahora, pese a haber solicitado varias reuniones con él, no los quiere recibir. “Es inhumana esta situación, no podemos ni dormir”.
Juan José González, quien lleva más de tres meses esperando una reunión con el presidente de la Ciudad, está cansado de que “se pasen la bolita los unos a los otros”. Lleva más de 25 años viviendo en el edificio bajo la promesa de una vivienda, que al igual que con el resto de sus vecinos, no ha llegado. “Los nacidos en Ceuta parece que no tenemos derechos ningunos”, lamenta este ciudadano, que no entiende el trato que están recibiendo por parte del Gobierno local,
señalando, además de al presidente de la Ciudad, al anterior consejero de Fomento, Néstor García, como el responsable de lo que les está sucediendo. Reiteran que sólo piden una situación y no ser echados a la calle.