“Los jóvenes de Fnideq, tras el cierre de todos sus horizontes y la falta de oportunidades laborales, no han podido diferenciar entre la muerte y la vida.
El mar se ha convertido en la única esperanza para la inmigración hacia destinos desconocidos”. Así reza una carta que
un vecino de Castillejos ha compartido con El Faro de Ceuta para denunciar la realidad que se da para los jóvenes de la ciudad. Las imágenes que se dieron a conocer la pasada noche, en la que se veía a decenas de ellos corriendo en dirección al mar y echándose al agua para tratar de alcanzar las costas ceutíes, hablan por sí solas. “La juventud de la ciudad soñaba con vestirse con ropa de boda, pero las hojas se esparcían y su ropa se convertía en ropa de playa. El fenómeno de la inmigración ilegal traducida en jóvenes nadando se ha vuelto abrumador, como consecuencia de su declive”.
La situación económica y social en Castillejos es muy delicada. El cierre de la frontera ha asestado un golpe mortal a la localidad, que vivía principalmente del trabajo transfronterizo y el porteo. Para este vecino, “presagia desastres, y lo que vemos hoy [por la pasada noche] sucede en nuestras costas todas las noches y no hace otra cosa sino confirmar el fracaso de la política del gobierno para encontrar alternativas y soluciones adecuadas para salvar a los jóvenes de la pobreza, la marginación y el desempleo”. Las críticas hacia la administración quedan patentes entre unos vecinos que se sienten abandonados por parte de las autoridades marroquíes. “Lo que vemos hoy es una mancha en la frente de todos los funcionarios”. Les acusa de “bloquear los horizontes cercanos y lejanos” y de salvar su presente y futuro “de la bancarrota”.
“Seguir ignorando las demandas de los vecinos tendrá consecuencias nefastas en un futuro próximo, ya que no se ha abierto el paso de Ceuta, y no hay otras alternativas, comercio o turismo en esta ciudad afligida económica y socialmente”.