Frente a la entrada de
Juan XXIII está lo que algunos vecinos llaman ‘
el polideportivo de Juan XXIII’, que ahora es una obra a medio empezar, llena de desperdicios y de escombros que permanecen en el lugar sin que se haga nada al respecto.
En este lugar está pendiente por ejecutar el proyecto de la pista deportiva que ya lleva paralizado casi un año. Además, como parte de este proyecto está la reedificación de un nuevo local social.
“Ahí lo que hay son ratas del tamaño de camellos, hay basura, hay desperdicios”
Restos de muebles, colchones, madera, montones de arena y un enrejado que está ahí supuestamente para impedir el ingreso de las personas, pero que no cumple con su función. Ese es el panorama que se observa en el lugar y que los vecinos dicen no ha cambiado en mucho tiempo. “Ahí lo que hay son ratas del tamaño de camellos, hay basura, hay desperdicios, hay de todo. Era mejor que lo dejaran como estaba porque ahora es peor”. Dijo una de las vecinas que se quejó además porque “dejaron a los chiquillos sin un lugar para que puedan jugar, no entendemos qué fue lo que paso”.
Quienes viven en la zona señalaron que estas instalaciones podrían ser útiles para que los jóvenes cuenten con otro campo para practicar fútbol. Pero, al preguntar sobre lo que ha sucedido, la respuesta de los afectados es que se han olvidado de ellos y que desconocen cuándo es que se hará algo para evitar que esta obra siga siendo otro de los tantos basureros improvisados en la ciudad. La situación es de tal gravedad, que recientemente la
Federación Provincial de Vecinos se vio en la necesidad de enviar un escrito al presidente de la
Ciudad,
Juan Vivas, para que tomara cartas en el asunto.
“Había algo así como un polideportivo en la entrada, se pusieron a arreglarlo, pero ahora eso se está cayendo, lleva tiempo así y no se ha hecho más nada para mejorar la situación”, dijo una persona que aunque no vive en el lugar, transita con frecuencia por la zona.