Las entradas de inmigrantes siguen produciéndose por goteo en la ciudad. Así ha ocurrido el pasado fin de semana, periodo en el que si bien la mar estuvo tranquila y no se detectaron entradas de sin papeles, no ocurrió lo mismo por vía terrestre. Tal y como han confirmado fuentes oficiales a El Faro, se produjo la entrada de varios subsaharianos que habían accedido a la ciudad a través del paso fronterizo del Tarajal, ocultos en dobles fondos de vehículos. El número no ha sido concretado pero rondaría la media docena. Todos ellos varones subsaharianos, procedentes de distintos puntos del África subsahariana y que llegaron a la ciudad sirviéndose de vehículos con los que se les facilitó el pase.
A pesar de las actuaciones llevadas a cabo por la Policía Nacional que se han saldado con detenciones de pasadores de subsaharianos, esta vía de entrada sigue siendo explotada y permite el acceso, previo pago de cantidades más elevadas, de inmigrantes.
La presión por frontera intenta extenderse también al perímetro, en donde en los últimos días la Benemérita está detectando acercamientos al vallado. Son, de momento, de grupos muy reducidos de no más de cinco personas, pero lo suficientemente constantes como para que signifiquen el ‘sondeo’ que, desde el otro lado, se está llevando a cabo de la vigilancia que hoy por hoy hay en la línea fronteriza.
Hasta la fecha solo dos subsaharianos han conseguido entrar por la valla, ambos hace un par de semanas y en menos de 48 horas.