Categorías: Colaboraciones

Valió la pena

Un suspiro al aire, quizás los trabajos no necesiten de gestos extraordinarios y, sobre todo, de carácter oneroso, para que sean reconocidos como una excelente labor. Esta fue la reacción que causó tanto en mí como en el resto de integrantes de ADESC (Agencia para el Desarrollo Económico y Social de Ceuta), el hecho de que un simple posicionamiento, independientemente de su condición, pueda premiar, aunque sea de manera simbólica, el trabajo que venimos realizando en el seno de esta agencia, desde nuestra fundación en enero de 2010.
Y curiosamente el gesto ha venido del que menos se esperaba, no es una postura que conlleve gratitudes cínicas ni contraprestaciones como muchos puedan pensar, pero más que suficiente para sentirnos con la fuerza y el empuje suficientes para seguir por la senda de la sensibilización y la diplomacia, fomentando el bienestar de los ciudadanos de ambos lados de la frontera.
Estos cauces siempre debieron existir entre Ceuta y la zona norte de Marruecos, entre España y Marruecos. No cabe duda, nuestro empeño sigue viento en popa, y las prioridades en reforzar la cohesión social siempre encuentran espacio en el amasijo de expedientes administrativos que inundan cualquier administración, menos la de nuestra propia ciudad, desesperanzador.
De todos es conocida la cantinela sobre la soberanía de Ceuta y Melilla, no cabe discutir sobre ella, pues no es la prioridad para el bienestar de los ciudadanos. Una atmósfera positiva se respira en la Administración marroquí, refrendada por las declaraciones del Presidente de la  Cámara de Consejeros del país marroquí, Mohamed Cheikh Biadillah, que vienen a confirmar las excelentes relaciones entre los dos países y que sitúan esta cuestión fuera de las prioridades a discutir entre las administraciones de ambos países. Desde ADESC nos sentimos partícipes de este acercamiento, otorgando una mejor sedimentación a las bases que venimos estableciendo con el asentimiento y simpatía de las principales instituciones gubernamentales de ambos países, así como de la Comisión Europea.
La Inversión Directa Extranjera ha ido moldeando la figura de Marruecos como un país emergente, la revista especializada fdi Intelligence del Diario económico Financial Times dedicó uno de sus artículos a mediados de 2011 a este efecto, situando a Marruecos como país del futuro en África, así como situándole en el primer puesto en la categoría de infraestructuras, por el desarrollo de las vías de comunicación y por las plataformas industriales integradas.
Sin embargo, falta la otra pieza del puzzle, que Ceuta se vuelque en aprovechar esas sinergias. Unas simples declaraciones institucionales sobre el mimo al turista marroquí no bastan. Se encuentran encima de la mesa muchas cuestiones que merecen la atención debida de la administración ceutí. ADESC ha encontrado un camino cierto sin su apoyo, es hora de que se sume al carro, los datos de la economía ceutí no pueden ser más desalentadores. Pero no deben mirar para otro lado.
Las ideas que desde ADESC se han propuesto no han dejado de fluir. Hemos conseguido cambiar el debate de una ciudad anclada en un debate económico insulso. Nosotros seguiremos nuestro camino, que se abre amplio y florecido, con el esfuerzo de unos pocos pero el corazón de muchos que, aunque no lo manifiesten, es latente, se percibe.
“21 años”, era el título de un artículo que no ha mucho tiempo publicó el Presidente de ADESC, Abdelmalik Mohamed Amar, en el Diario El Faro de Ceuta. Esa fecha constituyó un gesto que en aquel momento no tuvo precedentes: los presidentes de ambos países (España y Marruecos) cruzando la frontera del tarajal. No andamos lejos de él, gracias al acercamiento mutuo del que nos consideramos partícipes y que nos sitúan como el único interlocutor válido en las relaciones Ceuta- Marruecos, pues siempre buscamos potenciar el lado social, que por sí mismo procura las relaciones entre ciudadanos y la generación de bienestar y riqueza.
Cabe reforzar ese marco de relaciones. ADESC ya se encuentra trabajando en ello, en próximas fechas, enviaremos a sendas administraciones el documento que ya tenemos preparado, relativo a un “Estatuto para la mejora de vida de los ciudadanos de Ceuta y la zona norte de Marruecos”. Es hora de crear verdaderos grupos de trabajo en ambas administraciones, estamos convencidos que podremos aportar nuestro grano de arena para seguir cimentando esas relaciones.
Y como escribió el autor francés Jean de la Bruyère, miembro de la Academia francesa en pleno siglo XVIII (Siglo de las Luces): “No hay amistad verdadera si no existe disposición de perdonar los defectos del otro”.
Sin duda, valió la pena

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