El Instituto Nacional de Gestión Sanitaria sancionó a dos enfermeros tras solicitar estos y serles concedidos un permiso por matrimonio, según el sindicato
“Soberbia, despótica, embustera y prepotente”. El sindicato Unión Sindical Obrera (USO) se despachó ayer a gusto. Los adjetivos usados para calificar la actuación de la dirección del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa) pecaron de todo menos de falta de claridad. La intención del sindicato es denunciar al instituto público por un supuesto caso de prevaricación al haber sancionado a dos enfermeros que cumplían una interinidad en verano y que, tras solicitarlo, les fue concedido un permiso de 15 días tras casarse.
Pese a los calificativos, el secretario general de USO, Juan María Lorenzo, expresó su intención de ser cauteloso. “Estamos estudiando llevar al Ingesa a los tribunales”, dijo Lorenzo. El delegado del Ingesa, Javier Montero pormenorizó: “El siguiente paso es judicializar el caso. De un lado, queremos alegar la sanción al juzgado de lo Contencioso-Administrativo para pedir la suspensión cautelar. Además, estudiamos la forma de presentar a la Fiscalía la sanción impuesta a los dos enfermeros. También existe un supuesto acoso laboral llevado a cabo contra estos dos enfermeros”.
La historia de la sanción es como sigue, según explicaron los miembros del sindicato USO. La pareja de enfermeros, incluida en la bolsa de trabajo del Ingesa, accedió a sendos puestos del hospital para cubrir las vacaciones estivales. En el transcurso de la interinidad, los dos enfermeros decidieron contraer matrimonio, a lo que siguió la pertinente solicitud del permiso de 15 días, según un pacto suscrito en 2006 por sindicatos e instituto público. La sorpresa les sobrevino a los enfermeros –que han preferido conservar el anonimato– al serles impuesta una sanción por parte del instituto público: expulsión de la bolsa de trabajo hasta que se produzca una nueva baremación, aseguraron las fuentes sindicales.
Lorenzo mostró su perplejidad ante lo ocurrido aseverando que “el Ingesa declaró que, de saber sobre los planes de matrimonio, no los hubiera contratado. Queda demostrado que, para el Ingesa, exigir los derechos no es compatible con la contratación”, declaró Lorenzo, que criticó la práctica habitual de la dirección del Ingesa de acudir a los interinos a la hora de suplir las vacantes. Asimismo, y en relación al mismo caso, Lorenzo mostró sus dudas por la posibilidad de que haya existido un delito de acoso laboral a los mismo enfermeros. “En una reciente ley sobre acoso laboral”, explicó Montero, “aparecen detallados los supuestos de acoso. Pues bien, estamos estudiando si los compañeros han sido objeto de hasta tres de los cuatro supuestos contemplados en la ley”.
Una extensa ristra de denuncias
La dirección del Ingesa no tendrá una plácida despedida de legislatura. El sindicato USO aprovechó para criticar varias de la actuaciones del Ingesa llevadas a cabo en los últimos meses. Aparte de la sanción impuesta a los dos enfermeros, la organización sindical enumeró una serie de cuestiones con las que apuntan de mala praxis a los dirigentes del instituto público: la ausencia de celebración de elecciones sindicales, el excesivo número de horas trabajadas sumadas por parte de la plantilla del hospital o el proceso de movilidad en curso, particular que USO denunciará junto a los sindicatos CCOO y CSIF, aseguraron.
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