Los más 2.200 ceutíes que participarán previsiblemente la próxima semana en el sorteo de 249 viviendas de la promoción de Loma Colmenar, los 1.713 aspirantes del cupo general y los 490 del bombo exclusivo para familias en régimen de alquiler social, solo piensan estos días en lo que harán si resultan agraciados con una casa.
Pero incluso si su número coincide con los que salgan del bombo todavía estarán lejos de entrar en una de las casas.
Emvicesa mantiene que la entrega de las viviendas no se producirá hasta finales de año y no antes de noviembre, según ha explicado su directora gerente, Kissy Chandiramani, ya que del sorteo lo que saldrá será una “lista ordenada de posibles adjudicatarios” , que aún no podrán ser considerados si quiera adjudicatarios provisionales hasta que se examine la documentación que se les pedirá una vez concluido el sorteo.
Y es que la selección del sorteo “no genera derecho alguno a efectos de adjudicación, ya que la acreditación de los requisitos recogidos en las bases de la convocatoria del proceso de adjudicación se producirá con posterioridad a la celebración del sorteo”, matiza. Es decir, si resulta agraciado en el sorteo estará muy cerca de su vivienda, pero Emvicesa le requerirá toda la documentación y sólo en el caso de que sea correcta acabará accediendo a ella y con las llaves en la mano.
Y es que de momento, solo se ha requerido a las personas que van a participar en el proceso de adjudicación por sorteo -hay otras 68 viviendas que se van a adjudicar por cupos de manera directa- dos requisitos: llevar más de tres meses inscrito en el registro de demandantes de Emvicesa y estar incluido en el programa de alojamiento alternativo de la Consejería de Asuntos Sociales, que en este caso tendrán su propio bombo en el sorteo para optar entre 125 viviendas.
Por este motivo, solo una vez que se haya celebrado el sorteo y de los bolillos que salgan se confeccionará una lista, “que podrá variar o no en función de si las personas que salgan elegidas cumplan los criterios de adjudicación que están previstos en el reglamento”, añade Chandiramani. Los agraciados en el sorteo deben disponer de ingresos inferiores a 2,5 veces el Iprem, carecer de otra vivienda en propiedad y acreditar residencia en Ceuta durante al menos los últimos 48 meses. Y es que se trata de requisitos imprescindibles que en el caso de que se incumplan supondrá la eliminación automático del interesado y correrá lista. Así, serán eliminados automáticamente quienes superen los ingresos mínimos establecidos en las bases, quien sea titular de otra vivienda pública (o la haya cedido, renunciado, alquilado o vendido), quien haya sido desahuciado por incumplir la función social de una VPO o quien no esté empadronado realmente en Ceuta. También quedará fuera todo aspirante que haya ocupado ilegalmente una vivienda protegida o presente documentación falsa.
Peor el proceso no termina ahí. Una vez revisada la documentación se publicará una lista de adjudicatarios provisionales, que estará expuesta públicamente durante unos 15 días para presentación de alegaciones. Una vez concluido ese plazo y con la resolución de las reclamaciones se elaborará la lista definitiva, que también será sometida a exposición, en este caso, durante un mes por si alguien que se hubiera sentido perjudicado quisiera presentar un recurso de alzada ante el Contencioso Administrativa.
Con posterioridad a todo este largo y burocrático proceso que será posterior a la celebración del sorteo deberá reunirse de nuevo la Comisión Local de la Vivienda, que se encargará de dar validez a la lista firme de adjudicatarios de la promoción, algo que se estima que se producirá entre los meses de noviembre y diciembre.