Un inquilino moroso de Ceuta adeuda de media 5.898 euros

Fichero de Inquilinos Morosos ha presentado los resultados del ‘Undécimo Estudio FIM sobre Morosidad en Arrendamientos urbanos en España’, donde determina la evolución de la morosidad en las relaciones contractuales de alquileres en el conjunto del territorio nacional y en las diferentes comunidades autónomas que lo componen. En el análisis, que toma como referencia las inscripciones que ha tenido el fichero entre el 1 de enero y el 31 de diciembre de 2018, se muestra que en la ciudad autónoma de Ceuta los inquilinos morosos contrajeron una deuda de 5.898 euros de media, ligeramente inferior a la media de España (6.186 euros)

El mercado inmobiliario del alquiler en Ceuta es de menor tamaño que en el resto de zonas analizadas, por lo que cualquier cambio puede tener gran incidencia sobre los resultados finales. Además, las rentas del alquiler no son muy elevadas, lo que explicaría que la mora media se encuentre por debajo del dato nacional.

La morosidad aumenta un 3,08%

El undécimo ‘Estudio FIM sobre Morosidad en Arrendamientos Urbanos’, también desvela cuál es la tendencia del número de imagos registrados en la ciudad autónoma. Después de disminuir en 2017, en 2018 la morosidad ha aumentado un 3,08%.

Como explica Sergio Cardona , Director de Estudios y Calidad de Fichero de Inquilinos Morosos : “El mercado del alquiler en Ceuta es pequeño, el volumen de viviendas arrendadas no es comparable con otros territorios como Madrid o Barcelona, por lo que cualquier pequeña variación en la tendencia se refleja rápidamente en los indicadores globales”. La explicación es sencilla : “Aún son pocos los propietarios ceutís que dejan constancia de los casos de morosidad en arrendamientos urbanos, por lo que los cambios de un año a otro pueden ser muy significativos”, incide Cardona.

El estudio elaborado por Fichero de Inquilinos Morosos también revela que un propietario de Ceuta que tiene un inquilino moroso acumula 8 o 9 meses de impago antes de recuperar su inmueble. “ Para evitar este tipo de situaciones, conocer el tipo de inquilino que se interesa por la vivienda es fundamental”, incide el Director de Estudios y Calidad de FIM.

Además, los últimos cambios en la legislación en materia de alquiler se han traducido en una contracción inmediata de la oferta. “Las nuevas regulaciones que afectan al alquiler, están provocando inseguridad entre los propietarios de inmuebles en alquiler, que ven limitadas las garantías que pueden exigir al inquilino. Ante esta situación, muchos arrendadores han optado por buscar métodos alternativos para comprobar la solvencia del inquilino. Por ejemplo, en los últimos meses se ha multiplicado por dos el número de propietarios que solicitan a sus arrendatarios certificados que acrediten su solvencia y fiabilidad”, finaliza Sergio Cardona, Director de Estudios y Calidad de Fichero de Inquilinos Morosos.