Un grupo de tres subsaharianos optó por regresar a Marruecos después de que intentaran la entrada a nado bordeando el espigón de Benzú. La presencia de una patrullera de la Guardia Civil les hizo abandonar su propósito a pesar de que ya había sido avisada la unidad ‘Gadir’ por si se requería de sus servicios para el traslado a puerto.
La falta de vigilancia marroquí en las costas fue el detonante para que, sin miedo alguno, volvieran a territorio vecino dejando para otro intento su entrada en la ciudad. Los subsaharianos no se arriesgan a regresar a Marruecos si tienen constancia de la presencia de agentes marroquíes ya que saben que si son interceptados les rechazarán a la frontera pudiendo recibir además malos tratos.