Una avería en un centro de transformación de la Empresa de Alumbrado fue, al parecer, la causa del apagón que afectó a gran parte del centro de la ciudad durante más de treinta minutos, aunque en algunos lugares llegaron a estar sin fluido eléctrico hasta pasadas las once y media de la noche, según confirmó a esta redacción el consejero de Fomento, Juan Manuel Doncel, quien se encontraba de viaje oficial en Madrid acompañando al presidente Vivas.
Según la versión que maneja el Servicio de Industria de la Ciudad Autónoma, no ha existido ningún problema en la sede de Endesa en la Avenida Cañonero Dato y en las instalaciones de la misma no se había producido ningún problema. Desde el mismo ejecutivo se destacaba que los técnicos del Servicio de Industria se habían desplazado hasta este centro de transformación que, por lo visto, había causado la avería y allí estaban esperando junto a los responsables de la Empresa de Alumbrado a que se solucionara el problema. De todas maneras, también destacaban que había un gran número de empleado de la empresa de distribución intentando que el fluido eléctrico fuera llegando normalmente a las viviendas y comercios.
Aunque en una gran parte del centro a los treinta o cuarenta minutos de haberse producido el apagón se había solucionado el mismo, algunos vecinos de la Plaza de Azcárate a las diez y media de la noche todavía no tenían energía en su domicilio e incluso en algunos comercios del Paseo del Revellín a la once aún no tenían luz.
Desde el pasado mes de noviembre nuestra ciudad está viviendo una situación de apagones generalizados o parciales como no se había conocido.
Generadores para poder bajar las persianas de los establecimientos
Lo más pintoresco de la noche fueron las consecuencias que el apagón de luz tuvo en determinados zonas del mismo Paseo del Revellín, donde a las once de la noche algunos comercios no tenían todavía fluido eléctrico en el interior de sus establecimientos, con los problemas para poder bajar las persianas metálicas tanto de la puerta de los establecimientos como de los escaparates. Cada cual se las estaba ingeniando para poder terminar la faena de la jornada y regresar a sus hogares, sin embargo, mientras algunos intentaban que las persianas bajaran de manera manual, en determinados comercios buscaban la solución a través de artilugios como generadores de gasolina.
Estos propietarios comentaron a esta redacción que se está viviendo una situación en relación con la energía eléctrica como no se había conocido desde hace años en nuestra ciudad y también se acordaban de otro apagón que se produjo un día por la mañana y hasta bien entrado el mediodía no tuvieron luz en sus comercios.