El
Sector de Enseñanza de la FeSP-UGT ha denunciado la situación de los docentes interinos del
Ministerio de Educación y Formación Profesional en Ceuta. Según señalan desde el sindicato, en marzo, por tercer mes consecutivo, al profesorado interino no se le ha devuelto “el dinero que les sustrajo durante los meses pasados de manera errónea”. Además, la Subdirección General de Personal le ha vuelto a aplicar un un descuento del IRPF sin la desgravación fiscal del 60% de Ceuta. Cada trabajador afectado, han indicado desde la entidad, ha sufrido “una retención entre 700 y 1.200 euros de más en lo que va de año”. “Y nos quedan nueve meses por delante”, ha advertido en un comunicado la FeSP-UGT, que considera que el
MEFP y la Subdirección le vuelven “a tomar el pelo”. La entidad sindical ha explicado que la solución que aportó la Subdirección general de Personal a principios de marzo fue “limitarse a enviar unas instrucciones para que se corrigiera el error desde el propio negociado de nóminas” de la Dirección Provincial de Ceuta, un organismo —ha añadido— “sin personal” en la actualidad, por lo que además de sus propias labores deben subsanar estas cuestiones como “añadido”. Una vez se llevaron a cabo las correcciones, ha manifestado el sindicato, los responsables de la subdirección volvieron a modificarlas, “deshaciendo” la labor efectuada en Ceuta. “Si todo esto ya parece descabellado, falta ‘la guinda’”, ha expuesto la FeSP-UGT: ese trabajo extra “ha impedido que gran número de los interinos que trabajan por sustitución hayan cobrado su salario” en marzo “ya que no se han podido incluir sus nóminas a tiempo”. Según han argumentado desde el sindicato, “todo esto podría haberse evitado de haber asumido de forma excepcional el personal competente de la Subdirección General de Personal, en Madrid, dichas tareas hasta solucionar la falta de personal del negociado de nóminas de nuestra Ciudad”. El profesorado “no tiene por qué pagar las consecuencias de la incapacidad del MEFP y de su Subdirección General de Personal para gestionar sus competencias”, ha concluido la entidad, que también se ha preguntado si es “tan difícil gestionar dos ciudades” y “pagar a los trabajadores” por su labor.