Este viernes se ha organizado
un minuto de silencio en señal de apoyo y solidaridad con la población civil del conflicto de Gaza. Un acto que ha tenido lugar en la entrada del edificio del
Campus Universitario de Ceuta y que ha estado promovido por la Universidad de Granada. En esta ocasión, la decana de la
Facultad de Educación, Economía y Tecnología de Ceuta, María José Aznar, ha sido la encargada de proceder a la lectura del manifiesto, ante el poco público que se ha dado cita en este enclave. Asimismo, ha indicado que su institución mantiene un “firme compromiso” por impulsar una sociedad más justa e igualitaria y, por supuesto, una sociedad en la que la paz, la justicia sean una realidad para todas las personas. “La Universidad de Granada se posiciona como un agente activo en la promoción de la paz, y rechaza categóricamente cualquier forma de violencia o guerra, en congruencia con nuestros valores fundamentales. La violencia, ya sea perpetrada por grupos terroristas o por la acción indiscriminada de un Gobierno, es absolutamente incompatible con el espíritu universitario”, ha remarcado.
Esperan una pronta solución
“Por ello reafirmamos nuestro compromiso con el diálogo y la negociación para la resolución de este y todos los conflictos armados, y condenamos las violaciones de los derechos fundamentales que está sufriendo la población civil de Gaza”, ha relatado. Asimismo, ha señalado que desde el inicio de la “gravísima” crisis humanitaria que tiene lugar en Gaza, el equipo de Gobierno ha puesto en marcha diversas actuaciones para mitigar su impacto en los miembros de la comunidad universitaria que se han visto afectados. “Hemos puesto a disposición del
estudiantado de títulos oficiales y de movilidad afectado todos nuestros servicios, incluyendo asistencia psicológica y económica. Para esto, hemos establecido un fondo especial de ayudas, análogo al otorgado en nuestro Programa de Ayudas a Refugiados, que lleva varios años en funcionamiento”, ha manifestado.
Compromiso de la Universidad de Granada
Al respecto, ha afirmado que este plan extraordinario de actuación refleja el compromiso de la Universidad de Granada con todas las personas vulnerables y con las comunidades académicas de Palestina, con las que mantienen unas relaciones de cooperación académica y una importante movilidad desde hace años. “El mantenimiento de los derechos humanos, el respeto por el derecho internacional, la justicia social, la promoción de la paz y la resolución pacífica de conflictos y, en nuestro ámbito específico, la preservación de un ambiente académico seguro y pacífico son las razones que guían nuestra actuación”, ha declarado. Por último, ha hecho énfasis en que tanto la universidad como los miembros de su comunidad se reafirman en lo expresado en sus Estatutos, el compromiso por la transmisión de los valores del fomento del diálogo, de la paz, del respeto a la diversidad cultural y de la cooperación entre los pueblos y se exige el cese inmediato de las actividades militares en Gaza.