UDCE se ha hecho eco de las quejas de numerosos ciudadanos sobre la existencia de una “campaña encubierta” emprendida desde el Gobierno del Partido Popular al objeto de incrementar sus ingresos. Un hecho que achacan a la escasa liquidez de la Ciudad, que está derivando en “aumentar su presión recaudatoria, sobre todo y teniendo en cuenta que, la otra fuente de ingresos, la deuda pública, va a estar más controlada por la Administración General del Estado”, explican en un comunicado.
El “exacerbado apetito recaudatorio” del que habla el principal partido de la oposición supone una serie de “irregularidades que claman al cielo y que están indignando a vecinos de las barriadas del Príncipe y de Loma Larga”, a los cuales, apuntan, se les reclama el pago del IBI (Impuesto de Bienes Inmuebles) de las anualidades comprendidas desde el 2006 al 2010.
UDCE tilda el cobro de este impuesto de “impertinente y fuera de lugar”, en cuanto “si bien la Ciudad cataloga a estas viviendas fuera del ordenamiento urbanístico y en una situación alegal, por otro lado sí que considera que son viviendas legales a la hora de computar el cobro del citado impuesto”.
Esta postura lleva al partido de la oposición a hablar de “actitud interesada e hipócrita” del Ejecutivo local, argumentando esta critica en el hecho de que desde el año 2004, UDCE ha venido reclamando. en sucesivas mociones e intervenciones plenarias, la regularización de las barriadas susceptibles de ello, “siendo aprobadas múltiples de ellas pero sin que el Gobierno haya movido un dedo para implementar lo acordado por el Pleno”, añaden.
Esta cuestión se extrapola con las tasas de alcantarillado, cuya reclamación, apuntan, corresponde al 2006, “un año antes de la entrada en vigor del recibo único en barriadas donde el servicio ni existe ni se presta”.
En consecuencia, para UDCE es evidente que el Gobierno del Partido Popular, ha decidido, ante las expectativas de recorte, “potenciar la única vía de ingresos que les queda, que es la de los impuestos”. Este hecho pone de manifiesta que esta legislatura “pasará a la historia como la legislatura de la presión fiscal, y en donde los ciudadanos de Ceuta, tuvieron que pagar de sus bolsillos la ineptitud del Gobierno popular”.